Alemania abre la caja de los espías

Alemania ha dado un importante paso para reconstruir el funcionamiento de la red de agentes de la República Democrática Alemana (RDA) en Occidente gracias a la descodificación de un banco de datos de la Stasi (central de espionaje de la RDA, que dirigió el legendario Markus Wolf). El banco de datos contiene más de 180.500 descripciones de documentos e informes y los seudónimos de 4.500 agentes. Hasta el descubrimiento de este arsenal informativo, se creía que los servicios de espionaje de la RDA tenían una red de 2.500 agentes en Occidente.Esta información, publicada en el último número del semanario Der Spiegel, ha sido confirmada por el departamento federal encargado de la custodia de los documentos que la Stasi no logró destruir.

El banco de datos ocupa cuatro cintas magnéticas que contienen materiales obtenidos entre 1969 y 1987. Eran copias de seguridad efectuadas este último año que fueron olvidadas en un bunker antinuclear del antiguo Ejército de la RDA. El desciframiento, que los expertos occidentales habían dado por imposible, se logró por fin poco antes de la pasada Navidad gracias a la intervención de dos ex ciudadanos de la RDA, un antiguo empleado civil del Ejército de la RDA y un técnico en telefonía.

Los datos descifrados permiten rastrear el origen y el trayecto seguido por los documentos occidentales que llegaban a la central de espionaje germano-oriental. Además del seudónimo del agente que suministraba la información, hay una descripción del documento entregado y también constancia de la decisión sobre su entrega al KGB (el Comité de Seguridad del Estado de la URSS).

En el material descifrado figuran muchos nombres conocidos. Según Der Spiegel, Adolf Kanter, un antiguo colaborador de Kohl, está registrado cerca de mil veces. Kanter fue condenado por espionaje para la RDA en marzo de 1995. También el ex dirigente del grupo parlamentario del SPD Karl Wienand, condenado a dos años y medio de cárcel en 1996, figura casi cuatrocientas veces. De momento no ha aparecido el espía de la RDA en el Vaticano, señalaba el diario Tagesspiegel, citando fuentes del servicio de custodia de los documentos. El diario Bild am Sonntag, sin embargo, informaba de que, desde 1960, la RDA tenía dos agentes en el Vaticano, con los seudónimos de Rayo de Luz y Antonius.

Los nuevos datos constituyen un poderoso instrumento para negociar con la Agencia Central de Inteligencia norteamericana (CIA), que desde 1990 monopoliza una lista microfilmada de los agentes de la RDA. La CIA ha dosificado la información a sus colegas alemanes, pero Alemania tiene ahora un nuevo argumento negociador: más de once mil descripciones de documentos e informes, conseguidos por los espías germano-orientales responsables de Estados Unidos. Según el diario Süddeutsche Zeitung, Washington está dispuesto a entregar a Alemania la información de la que dispone en las próximas semanas.

Las autoridades alemanas no excluyen ahora que la nueva lista de 4.500 nombres pueda continuar aumentando, lo cual podría provocar una nueva oleada de escándalos sobre el pasado en Alemania. Es previsible, no obstante, que la mayoría de los delitos que pudieran descubrirse hayan prescrito ya. Peter Busse, uno de los responsables de la custodia de los archivos de la RDA, ha subrayado que para poder completar la lista de agentes se necesitan los datos en poder de la CIA y ha pedido al ministerio de Exteriores que gestione su devolución.

La información sobre el hallazgo de las cintas se ha producido poco después de que la dirección del PDS (el partido de los ex comunistas de la RDA) se haya ratificado en su decisión de emplear como colaborador en su grupo parlamentario en el Bundestag a Reiner Rupp, más conocido por Topas, su seudónimo como espía de la RDA. Según los documentos descodificados, Topas entregó 1.037 documentos a la central de espionaje de la RDA.

Gregor Gysi, el presidente del grupo parlamentario del PDS, quien defendió la contratación de Rupp, manifestó que el trabajo de los responsables de los archivos de seguridad de la RDA tiene sentido si contribuye a la elaboración de la historia.