La antítesis de Cascos releva a Rajoy

Ángel Acebes estaba ayer contento, satisfecho y esperanzado. Igual que su familia. Ha pasado los dos años y medio peores que se le pueden pronosticar a un político, por diversos conflictos internos en el PP y sobre todo por los atentados en el País Vasco contra sus ediles, y no ha salido mal parado. Sólo se le aprecia más delgado y con muchas más canas. Ahora va a ser ministro del Gobierno de la nación. Uno de los elegidos por José María Aznar.Acebes accedió al incómodo puesto de coordinador general del PP, el número tres en potencia, el 13 de mayo de 1996 tras la fuga al Ejecutivo de Aznar de los principales pesos políticos del partido. Nada más aterrizar en la séptima planta de Génova, 13, la sede nacional del PP, se tropezó con el fantasma del aún secretario general. La impronta de Francisco Álvarez Cascos, que en el PP dicen que se nota desde que su coche oficial se acerca al aparcamiento, no ha dejado a Acebes volar con su propio estilo. Nacido en Ávila hace 41 años, está casado con Ana, tiene dos hijos a los que apenas ve, y es abogado.

Desde luego no tiene nada que ver con el prototipo que Álvarez Cascos ha construido de sí mismo. Es lo contrario. Sin embargo, durante este periodo, ambos han convivido aceptablemente. Sobre todo porque a Acebes no se le conoce en el PP un sólo enemigo. Al menos por ahora.

Todo se estropeó cuando saltó la crisis del PP de Asturias, pronto hará un año. Cuando el presidente asturiano, Sergio Marqués, y sus consejeros, expusieron públicamente su rebeldía hacia los mandatos de la dirección nacional del partido, Francisco Álvarez Cascos se negó a delegar sus funciones como secretario general del PP. Impuso su liderazgo natural en el Principado.

Acebes intentó alguna mediación pero todos sus deseos de pacificación acabaron frustrados, en parte por culpa de Álvarez Cascos, y también por la posición del propio Marqués.

Acebes fue designado por Aznar y la ejecutiva del PP para dirigir el partido después de que su nombre se barajara entonces, en 1996, para todos los niveles de responsabilidad, desde la portavocía del Grupo Popular en el Congreso hasta la del Gobierno o una cartera ministerial. Casi como ahora. A esos puestos se sumaba últimamente el de candidato a la Junta de Castilla y León, que preside Juan José Lucas.

Todo arrancó para Acebes en 1982, cuando conoció a un joven y engominado Aznar en Ávila de la mano del descubridor de ambos, Feliciano Blázquez, un reputado médico local. Aznar buscaba su primera acta de diputado como cunero. Acebes apenas contaba 24 años y estudiaba Derecho. Conectaron. Acebes inició su carrera política en junio de 1987 al desempeñar el puesto de concejal y portavoz del Grupo Popular en el Ayuntamiento de Ávila, donde se mantuvo hasta 1991. Fue diputado provincial entre 1987 y 1989 y en las cuartas elecciones municipales, en 1991, fue elegido alcalde de Ávila, puesto que ocupó hasta 1995.

Elegido senador por esa provincia en la IV y V legislaturas, en ésta última acabó como portavoz, tras suplir a Alberto Ruiz- Gallardón. También representó a su grupo como portavoz en la comisión aprobada para investigar las responsabilidades políticas en el caso GAL.