Guardar el avión en casa, el sueño de todo piloto

El proyecto de aeródromo incluye una urbanización con garajes-hangar incorporados a las casas en las que se guardarán las avionetas, trasladando el modelo de la cercana urbanización náutica de Empuriabrava al mundo de los aviones. Estas urbanizaciones, conocidas como fly comunities, funcionan con éxito desde hace 20 años en Estados Unidos. En Europa todavía no ha prosperado ninguna. "El éxito está asegurado porque el sueño de todo piloto es guardar el avión en casa", asegura Joaquim Densalat, quien vuela desde hace 29 años. La asociación ecologista Iaeden cree que las instalaciones no beneficiarán a la población de la zona y que sólo serán utilizadas por pequeños aviones privados, cuyos dueños viajarán atraídos "por el casino, el golf y la oferta gastronómica selecta". Antoni Llobet asegura que esta filosofía turística rompe el equilibrio territorial. Densalat, por el contrario, afirma que "la aviación es el presente" y que ya han pasado los tiempos en los que para volar había que ser un privilegiado. "Vendrá algún jet privado, pero también avionetas o pequeños aviones de línea", puntualiza el promotor, quien recuerda que en España hay un déficit de aeródromos. Densalat advierte de que se trata de un aeropuerto residencial y de negocios. Entre las alegaciones presentadas se encuentra la del propietario de una granja de avestruces cercana a los terrenos. El ganadero Juan Pablo Grau piensa organizar una plataforma opositora junto con las asociaciones ecologistas y un grupo de afectados.