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Dos encapuchados queman una furgoneta en Vitoria y el PP recibe más amenazas

Mientras los partidos políticos dirimen en los despachos la necesidad de que Euskal Herritarrok (EH), la nueva marca electoral de Herri Batasuna, condene públicamente la violencia callejera, los jóvenes cachorros de la coalición abertzale radical continúan con su particular forma de actuación. Ayer, dos encapuchados provocaron el incendio de una furgoneta de Telefónica en una calle de Vitoria. Según informó la Ertzaintza, dos personas que se cubrían el rostro con pasamontañas lanzaron contra el vehículo una bomba incendiaria cuya deflagración calcinó el motor y el interior. El suceso se produjo a las 10.50 de la mañana en la calle Laguardia, en el populoso barrio de Zaramaga de la capital alavesa. Testigos presenciales relataron a la policía que los dos encapuchados lanzaron la bomba a los bajos de la furgoneta y huyeron a pie por una calle próxima mientras comenzaba el fuego. El vehículo había sido aparcado en esa calle por un técnico de Telefónica que prestaba un servicio a domicilio. Éste es el segundo ataque que sufre esta compañía en lo que va de año. El pasado miércoles un grupo de encapuchados incendió también una arqueta con equipos en Rentería (Guipúzcoa).Más cartas contra el PP

Tampoco hubo tranquilidad para los concejales del Partido Popular de Getxo (Vizcaya) que ayer recibieron una nueva remesa de cartas amenazantes, similar a las recibidas el pasado lunes por otros ediles populares. Encabezadas con la frase "lo vais a pagar caro", se responsabiliza a los concejales de "estar jugando con el sufrimiento de la sociedad vasca". El presidente del PP de Vizcaya, Leopoldo Barreda, reprochó al PNV que "no es de recibo que esté negociando una mayoría parlamentaria con un grupo que no condena la violencia", y le instó a que aproveche la reunión de Lizarra de hoy para hacer "planteamientos claros y no medias tintas" ante EH. El máximo responsable de los populares vascos fue más allá. Carlos Iturgaiz afirmó que "no hay en Europa un solo gobierno que se sustente en partidos que no condenan la violencia" y calificó de "inadmisible" que el Ejecutivo vasco se encuentre en estado de "hibernación". Los populares contaron con el apoyo de las Juventudes Socialistas de Euskadi, para quienes "no habrá paz real ni libertad real" mientras no se detengan las amenazas, los ataques a ciudadanos y la extorsión a los empresarios. Ante este rebrote de la violencia, el Partido Socialista de Euskadi pidió la comparecencia en el Parlamento vasco del consejero de Interior, Javier Balza, para que dé cuenta de todos estos incidentes e informe de las medidas adoptadas para combatir esta escalada de agresiones. Por su parte, el colectivo de víctimas del terrorismo, que hoy se reúne en Vitoria, enviará cartas a los ayuntamientos vascos en las que piden entrevistarse con los alcaldes para transmitirles su opinión de que se les tenga en cuenta en el proceso de paz. Por otro lado, cuatro de los seis jóvenes detenidos el martes en Pamplona acusados de violencia callejera han pagado ya la fianza, un total de 2,5 millones de pesetas, que les fue impuesta por la Audiencia Nacional. Los otros dos detenidos quedaron en libertad sin fianza.

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