La Bolsa de Brasil tuvo que suspender cotizaciones al sufrir un nuevo desplome

La crisis financiera no da tregua. Las medidas urgentes aprobadas la noche del miércoles por el Parlamento brasileño para hacer frente al plan de ajuste comprometido con el FMI y la moderada caída de Nueva York parecieron calmar los mercados de todo el mundo. Sin embargo, el drástico recorte del déficit presupuestario, por valor de 23.000 millones de dólares, que debe hacer Brasil este año no parece convencer a los inversores. Wall Street abrió con una fuerte caída -perdió el 2,45%- y arrastró de nuevo al resto de bolsas. Madrid, que llegó a ganar casi el 2%, acabó con el 0,05%. Y en São Paulo se suspendió la cotización por caer más del 10% tras haber empezado ganando.