Aznar desboca los rumores sobre cambios en el Gobierno al decir que pronto habrá una decisión

José María Aznar volvió ayer a ironizar y alimentar expectativas de posibles cambios en el partido y el Gobierno con una frase equívoca que soltó en Barcelona, al final de una convención del PP. Sin que nadie le interpelara al respecto, Aznar se refirió a las especulaciones sobre crisis en el Ejecutivo y anunció que adoptará "alguna decisión" próximamente y que cuando la adopte la dará a conocer "a todo el mundo". Algunos oyentes interpretaron que se refería a una crisis, pero desde el PP de Cataluña matizaron que se refería sólo a la secretaría general que dejará vacante Francisco Álvarez Cascos.

Sólo 48 horas después de que Aznar abriera las especulaciones sobre un cambio de Gobierno en una rueda de prensa en La Moncloa, volvió ayer a mantener las expectativas de posibles cambios con un discurso equívoco que pronunció en la clausura de la convención municipal del PP catalán en L"Hospitalet (Barcelona). "No cabe duda de que Aznar se está divirtiendo mucho", comentaron anoche fuentes de La Moncloa ante las interpretaciones que se estaban haciendo.El martes, el jefe del Ejecutivo había dicho a preguntas de los periodistas: "A día de hoy, el Gobierno no va a cambiar, y a día de mañana tampoco". Con estas palabras desataba las especulaciones de un cambio de Gabinete del que no sabe nadie nada, ni entre los miembros de su Consejo de Ministros ni en su entorno más inmediato.

Ayer nadie le preguntó. Fue él mismo quien soltó, sin nadie esperarlo, un mensaje igual de confuso. Ante unos 1.200 simpatizantes del PP y en tono irónico, comenzó diciendo: "Personas que dicen que suelen estar muy bien informadas decían que yo iba a hacer una crisis de Gobierno y la dibujaban perfectamente".

Tras resaltar que mientras se producen estas nuevas disquisiciones sobre las especulaciones publicadas él se dedica "todo el día trabajar", Aznar lanzó la frase más enigmática: "Sé que tengo que tomar una decisión, no se me vaya a pasar el tiempo del congreso del partido y no la haya tomado todavía. Pero la tomaré. La tomaré, la comunicaremos y todo el mundo la conocerá". Para aumentar aún más la ambigüedad de sus frases pasó, a renglón seguido, a hablar del congreso del PP, que se celebrará los días 29, 30 y 31 de este mes. En este cónclave, Francisco Álvarez Cascos dejará de ser oficialmente el número dos del partido y aún no está decidido su sustituto.

Las palabras de Aznar dispararon automáticamente las especulaciones entre los oyentes. Algunos interpretaron que estaba insinuando un cambio de Gobierno, y otros pensaron que se refería sólo a relevos en la secretaría general y en el partido.

Los representantes de la dirección del PP de Cataluña, presentes en el acto, defendían esta última interpretación, y así se lo comunicaron a la Secretaría de Comunicación de La Moncloa. Entre ellos figuraban el presidente provincial del PP en Barcelona, Antonio Ainoza, y el presidente regional del PP catalán, Alberto Fernández. Tampoco la directora de Comunicación del ministro de Administraciones Públicas, Mariano Rajoy, presente en el acto, dudaba de que Aznar se refería exclusivamente a los relevos en el partido.

La agencia oficial Efe, que a las ocho de la tarde envió un despacho en el que anunciaba que Aznar "tomará una decisión final sobre la remodelación del Gobierno" rectificó hora y media después con esta nueva redacción: "Se refirió a las especulaciones sobre una remodelación del Gobierno, afirmó que tanto ayer como hoy ha dedicado el día a trabajar y dijo que es consciente de que ha de tomar una decisión". En los discursos que habían precedido al de Aznar -habían intervenido los tres miembros de la mesa- nadie mencionó la posibilidad de una reestructuración del Gabinete.

Aznar regresó a Madrid con Rajoy, uno de los candidatos a suceder a Cascos. Rajoy no quiere sustituir a Cascos y hace poco le dijo Aznar: "Estate tranquilo". Una frase que se interpreta, en medios del PP, como que Rajoy seguirá en el Ejecutivo. Ayer el propio Rajoy insistía en que el cargo de secretario general del PP debe ser incompatible con el de ministro.

En fuentes de la dirección del PP se asegura también que las frases de Aznar deben ser interpretadas en tono bromista. Recordaban además lo establecido en los estatutos del partido, que fijan la elección del secretario general durante el congreso, que debe ser ratificado oficialmente para ese cargo de entre los 30 miembros del comité ejecutivo, y que deben ser aprobados por los 3.000 compromisarios.