Angola afirma que la guerrilla ha secuestrado a varios supervivientes del avión de la ONU siniestrado el sábado

Las autoridades militares angoleñas confirmaron anoche que hay sobrevivientes entre los 14 ocupantes del avión de la ONU que se estrelló el pasado sábado en el centro de Angola en una zona controlada por guerrilleros de la Unión Nacional para la Independencia Total de Angola (UNITA). El portavoz del Estado Mayor de Angola, el general de brigada João Manuel-Jota, informó de que los sobrevivientes fueron tomados como rehenes por los guerrilleros de UNITA después de que el avión fuera alcanzado por un misil tierra-aire. La información sobre las víctimas del accidente aéreo, según afirmó el general a la Radio Nacional angoleña, fue facilitada por prisioneros de UNITA que las Fuerzas Armadas capturaron ayer en la provincia de Huambo. La fuente oficial dijo que los sobrevivientes, cuyo número no se especifica, fueron trasladados por los guerrilleros desde el lugar del accidente a Bailundo y Andulo, bastiones del movimiento que encabeza Jonas Savimbi en Angola Central.

El jueves, el Gobierno angoleño aceptó una tregua y una operación de rescate de la Misión de las Naciones Unidas en Angola (MONUA) desde Huambo, capital de la provincia central angoleña del mismo nombre. Huambo fue bombardeada el pasado miércoles por UNITA obligando a la ONU, por razones de seguridad, a evacuar a su personal en el Planalto central. El avión siniestrado, al servicio del Programa Mundial de Alimentos de la ONU (PMA), transportaba comida y ayuda humanitaria desde Huambo para Saurimo (noreste de Angola) cuando cayó en la región de Boas Aguas, a unos 45 kilómetros al este de Huambo, por razones aún no aclaradas.

En el aparato viajaban cinco angoleños, dos rusos, un surafricano, un filipino, un egipcio, un australiano, un camerunés, un namibio, y el boliviano Carlos Melgar. En el momento del accidente, el avión volaba a una altura de unos 5.000 metros y los testigos oculares afirman que antes de caer hubo una explosión que le desprendió una de las alas.

Según portavoces de las Naciones Unidas, el fuselaje del aparato fue localizado a 45 kilómetros al sur de Huambo, en un área controlada por los rebeldes, aunque para acceder a la zona hay que atravesar territorio en manos del Gobierno.

Aunque fuentes próximas al Gobierno insisten en asegurar que el avión fue derribado por un misil de UNITA, la ONU se ha limitado hasta ahora a considerar la caída del aparato como un "accidente", en tanto no se hagan las comprobaciones oportunas cuando sean recuperados los restos. Representantes de UNITA afirmaron que aún no han sido contactados oficialmente por la ONU en relación a este accidente.