¡Ay de mi Alhama!
"Cartas le fueron venidas que Alhama era ganada... Que se toque alarma, porque la oigan los moros de la vega y Granada... Habéis de saber, amigos, una nueva desdicha" (romance de la conquista de Alhama).En el BOP (Boletín Oficial de la Provincia) de Granada, a 12 de diciembre de 1998, se publica un expediente de construcción de un complejo residencial en La Parra, denominado Gercentro-Alhama. ¿Cómo puede admitirse un proyecto que irá ubicado en una zona calificada como suelo serrano de especial interés? Este terreno fue propuesto en su día por la antigua Agencia de Medio Ambiente para declararlo monumento natural; son los tan conocidos Tajos de Alhama.
Aprovechando las fiestas de Navidad, con un procedimiento administrativo inapropiado, el recogido en el reglamento de informe ambiental aprobado por Decreto 153/1996, de 30 de abril, de sometimiento a información pública por un plazo de 20 días hábiles, cauce destinado a recoger alegaciones de terceros para proyectos puntuales; caso típico, la instalación de una gasolinera, y no para un macroproyecto. El tratamiento correcto sería plantearlo dentro de la redacción de las normas subsidiarias de planeamiento urbano, máxime cuando están sometidas a revisión. La adecuación de esta segunda vía viene dada por tener un carácter garantista, participativo. Dotado de distintas fases: la de avance, aprobación inicial, provisional, definitiva, con plazos más abiertos de 30 días como mínimo cada una, donde son llamadas instituciones como la Cuenca Hidrográfica del Guadalquivir, Medio Ambiente, Cultura, los ciudadanos.
Los Tajos son un límite natural del pueblo de Alhama de Granada y la idiosincrasia de esta localidad. Hay mucho terreno disponible; constrúyanlo ustedes en otro sitio. ¿Por qué en lo que debería ser un parque periurbano como zona de esparcimiento? Es una prueba más de la falta de previsión y de la destrucción de nuestros recursos. Busquemos dirigentes capaces de aplicar a sus pueblos planes estratégicos de desarrollo. ¿Es tan difícil? Si no lo conseguimos, mi pueblo ya no será, a tenor de las palabras de Teófilo Gautier, "... un nido de águila", sino un nido de especulación urbana.- y seis firmas más.
