Unos 50 militares se manifiestan en México contra la corrupción
Flanqueado por la enseña nacional y el estandarte de la Virgen de Guadalupe, el teniente coronel Hildegardo Bacilio Gómez, encabezó en la Avenida Reforma la primera protesta militar callejera de la historia moderna de México, y que manifiesta ambiciones políticas. Gómez marchó por la céntrica arteria de Ciudad de México uniformado, al frente de una cincuentena de compañeros de armas en libertad pero sujetos a juicio castrense por indisciplina. Todos exigieron la desaparición del fuero militar y que los salarios y beneficios económicos de los procesados no sufran mermas mientras dure el castigo. Confeso admirador del ex golpista venezolano de su mismo grado Hugo Chávez, hoy presidente electo, las reclamaciones del jefe mexicano en rebeldía fueron mucho más allá: arremetió contra la corrupción e ineptitud de políticos y gobernantes, llamó a la resistencia civil pacífica contra la política económica y la corrupción, y anunció la creación del Comando Patriótico de Concientización del Pueblo.
La reacción oficial a la insólita manifestación, efectuada el viernes, no se hizo esperar: sus integrantes serán severamente sancionados. El protagonista de la protesta, que pretendió viajar a Venezuela para entrevistarse con Chávez, pasó ayer a la clandestinidad.
