Pomés critica al PP por sus quejas sobre la retirada de escoltas

El consejero de Gobernación, Xavier Pomés, criticó ayer lo que considera una utilización política por parte del Partido Popular (PP) de la retirada de la protección de los concejales populares vascos. Pomés consideró que la polémica abierta sobre esta cuestión es la única "mancha negra" en el proceso de pacificación del País Vasco. Pomés, en declaraciones a Catalunya Ràdio, alertó del peligro de explotar políticamente este tema y añadió que "lo que no puede ser es que este sentimiento subjetivo quiera ser explotado desde un punto de vista político, porque son sentimientos personales que en todo caso se tienen que tratar con discreción". "Esto no beneficia a nadie, y si alguien piensa que creando esta polémica facilita las cosas, se equivoca terriblemente", añadió. Xavier Pomés también aseguró que el teléfono único de emergencias, el 112, una central que recibirá las llamadas de urgencias de los ciudadanos y las derivará a los respectivos servicios (sanitarios, policiales o de protección civil), ya está en periodo de pruebas y funcionará a pleno rendimiento después de las fiestas de Navidad. El consejero de Gobernación también anunció la creación en la provincia de Girona de oficinas policiales de relación con la comunidad, como ya se ha hecho en el caso de los malos tratos domésticos, que se extenderán a otros ámbitos. Acusación de Esquerra Por otra parte, el diputado de Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) Joan Ridao criticó ayer las "vacilaciones" de la Generalitat y la lentitud con que, a su juicio, está llevando a cabo el proceso de configuración del modelo policial catalán. En un comunicado oficial de ERC, Joan Ridao reprocha al Gobierno de CiU su "timidez" para culminar el modelo policial adoptado por la Junta de Seguridad en 1994, que preveía tres fases: el despliegue de los Mossos d"Esquadra en sustitución del Cuerpo Nacional de Policía y de la Guardia Civil en tareas de seguridad ciudadana y orden público, el paralelo repliegue de los efectivos de las fuerzas de seguridad del Estado y la adopción de un modelo policial catalán específico. El diputado republicano denunció especialmente "las vacilaciones" del Gobierno catalán con relación al avance del calendario del despliegue en la provincia de Barcelona y su zona de influencia, y la falta de efectivos surgidos de la escuela de policía de Mollet del Vallès para adelantar este proceso, previsto en algunas comarcas barcelonesas, como muy pronto, para el año 2001. A juicio del diputado independentista, el anuncio del consejero de Gobernación de que piensa convertir su consejería en un departamento de Interior "no es más que una cortina de humo" para esconder la inexistencia de un modelo policial claramente definido.