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La Complutense rechaza que la Comunidad declare su campus bien de interés cultural

La apertura de un expediente para catalogar la Ciudad Universitaria como bien de interés cultural y patrimonio histórico-artístico ha desatado las hostilidades entre la promotora de esta declaración, la Consejería de Educación y Cultura, y la principal moradora de los terrenos afectados, la Universidad Complutense. El inicio de este proceso de protección especial para el suelo universitario se produjo el 9 de diciembre, sólo dos días antes de que los rectores de las universidades con edificios en el campus de Moncloa (Complutense, Politécnica y UNED) firmaran un convenio con el alcalde de Madrid en el que se autorizaban varias operaciones urbanísticas. Con la declaración de patrimonio histórico-artístico, ese convenio ya no es suficiente: la última palabra la tendrá la dirección general de Patrimonio, dependiente de la Consejería regional de Educación.Los responsables de esta consejería han hecho hincapié en que este proceso "en ningún caso pretende entorpecer" el crecimiento urbanístico previsto por la Complutense, que anhela construir un nuevo edificio para Derecho y Filología (proyectado por Francisco Javier Sáenz de Oiza) y remodelar o ampliar media docena de facultades. En los órganos de gobierno de la universidad, sin embargo, no se acaban de creer estas promesas. "Yo creo que las casualidades no existen. Que la Comunidad de Madrid promueva sin previo aviso una resolución de estas características no es excepcional, sino único", enfatizó ayer el gerente de la Complutense y del consorcio urbanístico de la Ciudad Universitaria, Dionisio Ramos.

El recién nombrado viceconsejero de Cultura, Juan Carlos Doadrio, sostiene, por contra, que las "suspicacias" surgidas en los órganos de gobierno universitarios no están suficientemente justificadas. Doadrio explicó que su consejería está revitalizando las declaraciones de bienes de interés cultural a raíz de la aprobación de la Ley de Patrimonio, en julio. En el caso de la Ciudad Universitaria, el proyecto para su catalogación como conjunto histórico-artístico viene de lejos: una resolución ministerial del 3 de octubre de 1983.

"Mera casualidad"

Doadrio recalcó que su departamento ha ofrecido garantías al rector de la Complutense, Rafael Puyol, de que no habrá "ningún problema" a la hora de conceder el permiso para futuros edificios universitarios. "Ha coincidido que este expediente se ha abierto cuando las universidades firmaban un convenio con el Ayuntamiento, igual que la declaración de bien de interés cultural para el eje de Recoletos-Prado coincidió con la victoria del Real Madrid y la celebración en Cibeles. Pero no hay ninguna conexión entre unos hechos y otros. Todo es una mera casualidad", subrayó.El hoy consejero de Educación y Cultura, Gustavo Villapalos, pidió en 1990 la caducidad del expediente de declaración de conjunto histórico-artístico para la Universitaria. En un escrito fechado el 13 de marzo de aquel año, cuando era rector de la Universidad Complutense, argumentó: "[Ese expediente] obstaculiza el desarrollo normal de las actividades universitarias al tener que someter todos los expedientes de obras a un trámite innecesario de autorización previa, que es una duplicación de la solicitud de licencia municipal".

Las tres universidades presentes en la Ciudad Universitaria han convocado una reunión el próximo día 22 para analizar la nueva situación. La Politécnica y la UNED aún no se han pronunciado abiertamente, pero algunos responsables también se mostraron recelosos con el proceder del Gobierno autónomo.

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