Borrell replica a Aznar y afirma que "la corrupción es el presente del PP"

"La corrupción es el presente del Partido Popular". Con esta acusación, José Borrell trató de demostrar ayer que no acepta que el jefe del Ejecutivo, José María Aznar, amenace con refrescar los casos de corrupción protagonizados por socialistas si éstos insisten en las corruptelas de cargos públicos populares. El candidato socialista a La Moncloa resaltó que es ahora al PP al que corresponde dar explicaciones, porque es quien gobierna, y reprochó a Aznar que su reacción sea "la de un bravucón de barrio, más que la de un presidente de Gobierno".

El máximo representante del PSOE salió así al paso de la reacción de José María Aznar en el Congreso cuando, el pasado miércoles, fue preguntado por las subvenciones concedidas por el Ministerio de Industria a Miguel Pérez Villar, condenado por prevaricación cuando era consejero de Castilla y León bajo el Gobierno de Aznar.Borrell invocó que los socialistas ya han pagado un alto precio "por no haber sido capaces de controlar el uso que hicieron del poder" algunos de los militantes del PSOE. "Roldán está en la cárcel, y nosotros en la oposición. Lo que pasó, pasó", agregó el candidato socialista.

"La corrupción", contraatacó Borrell, "es el presente del PP. El Gobierno del Partido Popular es el que ha dado subvenciones a una persona condenada por prevaricación, y el propio Aznar figura en el sumario del caso de la construcción, que terminó con la condena de un alcalde de Burgos. Aznar tiene el pecho de cristal, y quien está puesto en cuestión hoy es él y su Gobierno. Él es quien tiene ahora que dar explicaciones".

El dirigente socialista hizo esas afirmaciones en una rueda de prensa, a mediodía, poco antes de recibir un premio como ex alumno distinguido del Instituto Francés del Petróleo, donde estudió con una beca en 1962. Cuando fue preguntado acerca de si considera equiparables las corruptelas del PP conocidas hasta ahora y las cometidas bajo Gobiernos socialistas, el líder electoral del PSOE replicó que ningún ministro de Felipe González ha sido condenado en un tribunal por prevaricación, mientras que sí lo ha sido un consejero del Gobierno de Castilla y León que presidió Aznar. Borrell sostuvo que aunque no exista ninguna norma que impida dar subvenciones a un cargo público condenado por prevaricación, el conceder ese tipo de fondos públicos equivale a ignorar un delito que infringe la ética que debe respetar cualquier gobernante.

El principal representante del PSOE se apresuró a matizar que los socialistas no tratan de entablar con los populares la dialéctica del "y tú más", sino de recordar que el PP está involucrado en irregularidades de las que tiene que dar cuenta. Borrell arremetió de nuevo, después de haberlo hecho la víspera en Roma, contra la incongruencia que representa que Aznar pida a la Unión Europea el mantenimiento de los fondos de cohesión para España a la vez que practica una política fiscal que reduce los ingresos públicos. Ayer dio un paso más y afirmó que España "ha dejado de usar un tercio de esos fondos de cohesión porque el Gobierno no ha dotado la cofinanciación suficiente, como consecuencia de los recortes en inversiones públicas. Eso es algo que se sabe en la cancillerías europeas".

El máximo representante del PSOE dio a entender en París que le interesa más atraer, de cara a las elecciones generales, el apoyo de fuerzas progresistas, como las que defienden el medio ambiente, que el de los comunistas, con los que parece difícil compartir líneas estratégicas. Anunció que la próxima semana se reunirá en Barcelona con el eurodiputado y líder de mayo del 68 Daniel Cohn-Bendit.

Borrell se entrevistó ayer por la mañana con el secretario general del Partido Socialista Francés, François Holland, con quien conversó sobre las posibles candidaturas para ocupar en los próximos años las presidencias de la Comisión Europea, de la Internacional Socialista y del Partido Socialista Europeo.