_
_
_
_

El Gobierno indonesio estudia detener a Suharto para investigar su fortuna

ENVIADO ESPECIALEl Gobierno del presidente de Indonesia, Yusuf Habibie, elevó ayer las expectativas de quienes exigen el juicio de Suharto cuando anunció que el anterior presidente de Indonesia podría ser sometido a arresto domiciliario durante la investigación sobre su riqueza. Si Habibie sigue adelante por este camino podría liberarse de parte de la presión estudiantil, aunque los más radicales exigen que también él sea sometido a juicio por sus connivencias con el régimen.

Más información
El gran ahorrador

La suerte de Suharto parece cambiar de día en día. Ayer fue el secretario de Estado, un cargo de la máxima confianza del presidente y líder del Golkar, el partido del Gobierno, Yusuf Habbie, quien insinuó que los soldados que ahora custodian a Suharto de las iras populares podrían convertirse a partir de la próxima semana en sus carceleros. Su casa de la calle Cendana, cuyo acceso estaba ayer cortado por diversos escudos de agentes antisdisturbios que sólo permitían el acceso a los vecinos, puede transformarse en una prisión dorada. Todo depende, según el secretario de Estado Akbar Tandjung, de lo que decida el fiscal general, Muhamad Ghalib. "Si él considera necesario ese paso... que es necesario poner bajo arresto domiciliario a Suharto, es una decisión que depende del fiscal".Ghalib tardó poco en reaccionar a estas palabras. "Convocaremos a Suharto cuanto antes (...) La próxima semana, Dios mediante", dijo horas después.

El fiscal general ya se entrevistó con Suharto en las últimas semanas, siempre en la casa del ex presidente, pero esta vez parece que está dispuesto a convocarle a su despacho. La actuación del fiscal general ha sido hasta ahora bastante cauta, tanto que el político islamista Amien Rais, uno de los presidenciables que ha pedido insistentemente el juicio del ex presidente, asegura que Ghalib "parece el jefe de relaciones públicas de Suharto".

Las palabras de Ghalib y de Tandjung no son pensables sin el visto bueno del presidente Habibie, quien de esta forma trata de contener la presión creciente de la calle. Los estudiantes, sin embargo, sobre todo los más radicales, no ceden. En el juicio a Suharto y su familia quieren ver también en el banquillo de los acusados al propio Habibie.

Ghalib anunció también que en sus pesquisas piensa interrogar a varios ministros y ex ministros del Gobierno para que éstos den cuenta de la actuación en el pasado de Suharto. No dio detalles, pero tal medida tiene que provocar a la fuerza escalofríos en una clase política que ha aplaudido y se ha beneficiado de los 32 años de Gobierno de Suharto. El propio Habibie, prohijado por Suharto cuando quedó huérfano, llegó al Gabinete en 1978 y estuvo en él hasta que en el pasado mayo pasó a presidirlo al ceder Suharto a las protestas de los estudiantes. Suharto mantiene que nunca se ha metido un céntimo en el bolsillo y que no tiene nada que temer de una investigación, por más que su abogado amenazara a principios de semana con que si se juzgaba al ex presidente no quedaría títere con cabeza de la antigua clase política.

Conocer lo que pasa fuera, es entender lo que pasará dentro, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

Un general próximo a Suharto advirtió incluso al Parlamento, que a mediados del mes pasado quería aprobar una investigación sobre el ex presidente, que si lo hacía Yakarta ardería.

A los Suharto, padre y seis hijos, se les atribuye una fortuna de 40.000 millones de dólares (unos seis billones de pesetas), obtenida del control de numerosos monopolios y de las comisiones en los contratos con empresas extranjeras que operan en el país, pero el presidente siempre ha negado tener nada que ver con los negocios de sus hijos.

La semana pasada cedió la presidencia de siete organizaciones caritativas con activos por valor de 500 millones de dólares y hace tan sólo unos días las autoridades que investigan sus patrimonio encontraron decenas de cuentas en bancos locales con un total de 2,6 millones de dólares.

También estos días ha trascendido que los Suharto eran propietarios de 2,4 millones de hectáreas de explotaciones forestales cuya propiedad hasta ahora se ignoraba.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_