Siete de cada diez minusválidos en edad laboral están en paro

De los 2.300.000 españoles que sufren alguna discapacidad física o psíquica, cerca de un millón se encuentra en edad laboral. Pero un 70% de ellos está en paro, según el Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales. Por eso, el principal objetivo de las políticas diseñadas para este colectivo para los próximos años será su integración laboral plena, anunció ayer, Día Internacional de las Personas con Discapacidad, el ministro Javier Arenas.El ministro de Trabajo y Asuntos Sociales, que ayer visitó dos empresas madrileñas en las que la mitad de la plantilla son personas discapacitadas, anunció que el Gobierno pondrá en marcha varias medidas en 1999 para acercarse a este objetivo. La más importante será la introducción como falta grave del incumplimiento del cupo -un 2% en las empresas privadas y un 3% en las públicas- de los puestos de trabajo reservados para minúsvalidos.

Estos cupos, establecidos por la ley de inserción del minusválido para las empresas con plantillas superiores a los 50 trabajadores, se incumple sistemáticamente, según la queja hecha ayer por la Confederación de la Coordinadora Estatal de Minusválidos Físicos de España.

El sindicato UGT se mostró de acuerdo con las sanciones y abogó por ampliar el cupo hasta un 5% en las empresas públicas y un 4% en las privadas.

Arenas se reunió con representantes del Comité Español de Representantes de Minusválidos y recordó que su ministerio ha invertido 175.000 millones de pesetas este año en medidas dirigidas a los discapacitados. La inserción laboral de este colectivo tendrá también un impulso económico en 1999. La partida presupuestaria del Plan Nacional de Empleo destinada a las personas con discapacidad aumentará en ese ejercicio un 20%, afirmó Arenas.

La Organización Nacional de Ciegos, por su parte, celebró el día internacional organizando en Madrid el II Trofeo Intercontinental de baloncesto en silla de ruedas.

Y el Centro de Recuperación de Minusválidos Físicos de San Fernando (Cádiz) aprovechó la ocasión para presentar el dispositivo que un grupo de profesionales, con la ayuda de los pacientes, han diseñado para hacer más fácil la vida cotidiana de las personas con discapacidad, incluso tetrapléjicos: un mando a distancia que, accionado con la barbilla, permite manejar todos los electrodomésticos, cerrar puertas y ventanas, o utilizar el teléfono.