Manesi, Chillida y Franquelo exponen los premios de Grabado

La Calcografía Nacional, de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando, de Madrid (Alcalá, 13), inauguró ayer la exposición con las 46 obras seleccionadas del VI Premio Nacional de Grabado, convocado por dichas instituciones, con el patrocinio de Philip Morris. En la sala figuran las obras ganadoras en las distintas modalidades, que corresponden a Óscar Manesi, Eduardo Chillida, Manuel Franquelo y la editorial Polígrafa.

Un concierto de la Orquesta de Cámara Rusa se celebró ayer en la entrega de los galardones del Premio Nacional de Grabado 1998, cuyas obras se exponen en la sala de la Calcografía Nacional hasta el 8 de enero. A partir de esta fecha, el montaje se presentará en Córdoba (palacio de La Merced), San Sebastián (Museo de San Telmo), Ibiza (Museo de Arte Contemporáneo) y Toledo (Museo de Santa Cruz).El grabador Óscar Manesi (Rosario, Argentina, 1942) fue el ganador del apartado de mejor obra realizada en 1997-1998, dotado con dos millones de pesetas, por Paisaje de guerra en África, realizada con técnicas de fotograbado, aguafuerte y aguatinta bruñida. Eduardo Chillida (San Sebastián, 1924) recibió el galardón por su actividad como grabador durante 1997. Dotado con dos millones de pesetas en adquisición de obra, Calcografía Nacional tiene la intención de pedir al artista que realice una plancha para el fondo del museo, como ocurre también con el grabado ganador.

En otras modalidades, sin dotación económica, Manuel Franquelo (Málaga, 1953) fue distinguido por sus innovaciones aportadas al arte gráfico, con la utilización de la tecnología digital, y la editorial Polígrafa Obra Gráfica, en reconocimiento a su labor en favor del arte gráfico.

El jurado, formado por Miguel Rodríguez-Acosta (presidente), Luis Gordillo, José Guirao, Francisco Calvo Serraller y Álvaro Martínez-Novillo, concedió dos menciones honoríficas, por la especial calidad de las obras, a Juan Giralt y Julio León. En esta edición se presentaron 215 obras, de las que 46 fueron seleccionadas para formar la exposición.

Juan Carrete, subdelegado de Calcografía Nacional, declaró en la presentación que el Premio Nacional de Grabado había cumplido los objetivos de realizar una labor de mecenazgo cultural y premiar aquellas obras en las que a criterios estéticos actuales se unía el buen hacer técnico.

Sobre la obra ganadora, Óscar Manesi, residente en Madrid desde 1976, en donde ha formado parte del Grupo15 hasta la creación de su propio taller y editorial de obra gráfica, dijo que Paisaje de guerra en África intenta representar "la desolación que queda después de la guerra". "La obra es un sentimiento que tiene la mayoría de los hombres cuando se enfrentan a una situación de impotencia. Creo que el hombre es inteligente como para controlar algunos momentos de su historia y evitar las guerras. África es la gran olvidada de los países ricos, después de ser muy utilizada por Occidente".

Sobre el lugar de la técnica en la realización del grabado, Óscar Manesi dijo que lo importante es la idea, lo que se quiere expresar. "No hay que preocuparse excesivamente de la técnica, sino desarrollar un pensamiento respecto a la plástica. Lo que hace un artista es muy pobre en relación con lo que hace mucha gente, que lucha para superar conflictos, pero trato de trasladar a un plano estético mi sentimiento personal".

Manesi considera que el grabado es una forma de expresión como cualquier otra, aunque se tiende a considerarlo un medio menor. "Quizá se deba a la multiplicidad de la obra, mientras se piensa en la obra exclusiva, pero hay que ver un original múltiple. Es cosa de educación".