El filme andaluz "Yerma" cierra hoy el Festival de Cine de Huelva

La película Yerma, dirigida por Pilar Távora y protagonizada por Irene Papas y Aitana Sánchez Gijón, clausura hoy el Festival de Cine Iberoamericano de Huelva, después de la proyección de más de 100 películas en ocho días. La mayor parte de Yerma la rodó en la sierra de Huelva por una productora sevillana. La sección a concurso, la que más expectación ha despertado del festival, se cerró anoche con la proyección de la película venezolana Piel y de la peruana Coraje. Estas cintas, junto con otras 12, compiten por el Colón de Oro, máximo galardón, dotado con tres millones de pesetas. El fallo se hará público hoy. Piel, película rodada en siete semanas con un presupuesto de unos nueve millones de pesetas, profundiza en el problema del racismo, asunto que el director de la cinta, Óscar Lucién, considera como clave en este fin de siglo. "En Venezuela hay mucho racismo, pero no se ve. Está confundido con el problema social. Pero a la protagonista de esta película, por ejemplo, se le aplicó en mi país una doble marginación, la de ser negra y la de ser colombiana. Ha tenido grandes dificultades para ser contratada en otras ocasiones", explicó Óscar Lucién. Coraje está producida por el director español Fernando Colomo y entre sus protagonistas figuran Rosana Pastor y Carlos Hipólito. Trata sobre un hecho real, la expresión del dolor que se sintió en Perú tras el asesinato, por parte de Sendero Luminoso, de María Elena, feminista y activista de izquierdas, pero que se oponía vivamente a las alternativas de la violencia. "María Elena [premio Príncipe de Asturias] fue una verdadera Madre Coraje, pero nunca se sumó a la acción violenta de Sendero Luminoso, pese a que su ideología era de izquierdas. Estaba cansada de vivir huyendo, debido a las amenazas de los terroristas. Por eso decidió salir a la calle, luchar, hacer una vida normal. La suya era una muerte anunciada", explicó el director de la cinta, Alberto Durán. El festival onubense ha destacado este año por las numerosas actividades paralelas al cine.