El Gobierno de UPN irá a Estella para "recuperar" la ciudad navarra

El Gobierno de Navarra (UPN-PP) ha decidido celebrar su reunión semanal del 1 de diciembre próximo, dos días antes de la fiesta oficial de la Comunidad Foral, san Francisco Javier, en la ciudad de Estella. El portavoz del Gabinete regionalista, Santiago Cervera, anunció ayer que el objetivo de la presencia de todo el Gobierno en Estella es, además de aprobar diversos proyectos territoriales que afectan a esa parte del territorio, "reivindicar el papel institucional" de Navarra en un momento en el que el nombre de la ciudad del río Ega se asocia automáticamente ante la opinión pública al frente nacionalista vasco materializado en la llamada Declaración de Lizarra , firmada el pasado mes de septiembre. El Gobierno foral, según señaló Cervera, desea con esta medida simbólica, acercar su presencia a "esta importante ciudad de Navarra", al tiempo que reivindicar la identidad de la comunidad aprovechando la festividad autonómica, en la que, además de los tradicionales actos en el castillo de Javier, se entregará en Pamplona la Medalla de Navarra al colectivo de más de 1.600 misioneros repartidos por el mundo y se ofrecerá un concierto de la soprano María Bayo y la orquesta Sinfónica de Galicia, en el Teatro Gayarre, como colofón cultural de la jornada. Hasta la fecha, el Gobierno de Navarra sólo se había reunido fuera de Pamplona en Tudela, en una ocasión. El Parlamento Foral de Navarra aprobó días atrás una declaración apoyada por todos los partidos políticos de la cámara excepto los nacionalistas, en la que se reitera la defensa de Navarra como comunidad diferenciada y con instituciones propias. Además, la decisión del alcalde de Estella, el socialista José Luis Castejón, de ceder las instalaciones de la Casa de Cultura Fray Diego para el acto de la firma de la Declaración de Lizarra, ha sido duramente criticada en las pasadas semanas por dirigentes de UPN-PP. Pese a las críticas, Castejón defendió su decisión y aseguró que, si se tratara de firmar la paz definitiva para el País Vasco y España, cedería "la propia Plaza de los Fueros" de Estella para ello.