El Gobierno se sorprende de que Galicia rechace un tope al bonito

El Departamento de Pesca del Gobierno vasco mostró ayer su sorpresa por la postura de rechazo que el sector pesquero gallego ha puesto de manifiesto ante la iniciativa del resto de instituciones y cofradías de pesca de la cornisa cantábrica de solicitar un tope de capturas para la pesca del bonito. A través de un comunicado, el Ejecutivo autónomo expresó su temor de que exista un "interés oculto" en esta postura, "interés que podría contar con el visto bueno de la Administración central e incluso la propia Unión Europea". En este sentido, el Gobierno vasco y la Federación de Cofradías de Bajura de Euskadi vienen solicitando la fijación de un tope de capturas admisibles (TAC) para esta pesquería, que se situaría en las 34.000 toneladas, así como un reparto de cuotas acorde con la media capturada en los últimos 10 años. Con esta solicitud, ambos organismos pretenden que esta pesquería siga realizándose por parte de las flotas que tradicionalmente la han venido efectuando, de España mayoritariamente y de Francia en menor medida, y se protejan las capturas de un stock que, según la Comisión Internacional para la Conservación del Atún Atlántico, "está plenamente explotado".