El 80% de los funcionarios de Trabajo denuncia anomalías en la lista del paro

El 80% de los funcionarios de las Oficinas de Trabajo de la Generalitat (OTG) ha firmado un escrito en las delegaciones de Barcelona y Tarragona en el que denuncia a sus superiores graves anomalías en la contabilización de los parados. Los funcionarios mantienen que los datos que manejan no son fiables y amenazan con no emitir certificados sobre el estado de la demanda de empleo. Los funcionarios denuncian que las OTG han detectado en las últimas semanas diversas anomalías en la gestión que hacen de la base de datos del Servicio de Información Laboral Español (SILE) que vienen utilizando. En primer lugar, se está dando de alta, como demandantes de empleo, a personas que no lo han solicitado (muchas de estas personas están trabajando desde hace meses y no tienen interés en inscribirse). En segundo lugar, se está dando de alta a personas que ya habían causado baja por no renovar su demanda de empleo (tampoco habían pedido volver a ser inscritas). Los funcionarios consideran aún más grave que, coincidiendo con el cierre estadístico del paro registrado, "personas que estaban de alta desde hace pocos días, se les ha dado de baja por no renovar la demanda de empleo el día 28 de octubre." "Estas personas no tenían que renovar la demanda hasta enero de 1999, como se puede verificar en la tarjeta de petición que poseen". Los funcionarios hacen hincapié en que estas "bajas" comportarán la pérdida de derechos para estos afectados. El escrito de denuncia hace referencia a extraños movimientos en la base de datos que coinciden con los cierres estadísticos del paro registrado. La "falta de garantías" de la base de datos lleva a los funcionarios a amenazar con negarse a emitir certificados sobre el estado de la demanda de ocupación. Los funcionarios razonan que "han transcurrido más de 10 meses desde la transferencia y no se ha resuelto ninguno de los serios problemas existentes. Esto les lleva a plantear que "la integración que se pretende hacer de los funcionarios de la antigua estructura del INEM a la nueva estructura de la Generalitat supone una importante pérdida en todos los sentidos, especialmente en la carrera profesional". El Departamento de Trabajo de la Generalitat cree que esta actitud de los trabajadores de las OTG tiene que ver con las negociaciones del convenio y afirma que el SILE "es un servicio que depende del Gobierno de España y no de la Generalitat".