Arenas aún confía en un acuerdo sobre el contrato a tiempo parcial

El ministro de Trabajo, Javier Arenas, se mostró ayer "optimista" sobre la posibilidad de alcanzar un acuerdo con la patronal CEOE y los sindicatos UGT y CCOO acerca del contrato estable a tiempo parcial. Arenas aseguró al respecto que "está resuelto el 90%" del asunto y restó trascendencia a las discrepancias que han llevado el diálogo al borde de la ruptura. El titular de Trabajo anunció que la previsible diferencia entre IPC previsto e IPC real (más bajo) se consolidará a favor de los pensionistas.

El ministro de Trabajo, que inauguró unas jornadas sobre empleo y discapacitados organizadas por la UE, el Gobierno de EE UU y la Fundación ONCE, se mostró confiado en el futuro del diálogo social, encallado en los aspectos más concretos de la regulación del contrato indefinido a tiempo parcial (horas complementarias y distribución de jornada)."Sólo en septiembre se han dedicado al diálogo social más de doscientas horas. El Gobierno va a seguir dialogando. El 90% está resuelto y es normal que al final aparezcan dificultades", declaró Arenas, quien abundó en la idea de que desde el Ministerio de Trabajo no se capta "ambiente de ruptura".

Las tranquilizadoras declaraciones de Arenas, restando trascendencia al pesimismo mostrado el pasado fin de semana por los sindicatos, coincidieron con palabras medidas pronunciadas desde el lado sindical, en especial desde CCOO, en las que se mencionaba la posibilidad de retomar el diálogo con Trabajo.

Por parte de UGT se advertía que, aunque la mesa de contratación temporal es importante, no define por sí misma el diálogo social. Uno de sus dirigentes, Manuel Fernández, Lito, reiteró que dicha mesa "está rota", aunque dejó la puerta abierta a un posible reinicio de contactos.

Ambos sindicatos suspendieron un encuentro previsto para armar un plan de acción en apoyo de sus tesis. Al mismo tiempo, según distintas fuentes, representantes sindicales y de la Administración seguían manteniendo contactos "oficiosos" para intentar salvar escollos.

En este ambiente, el titular de Trabajo lanzó una advertencia: cualquier medida tendente a incentivar el empleo estable (o lo que es lo mismo, el posible incremento de las cotizaciones empresariales para los contratos temporales) "no será una medida aislada", sino vinculada a un bloque de medidas para fomentar el empleo. "No se penalizará el contrato temporal, sino su abuso", señaló el ministro.

Para abundar en el tono optimista de sus declaraciones, y a preguntas de los periodistas, Arenas anunció que el próximo año, en el caso de que el IPC de noviembre (referencia para el incremento de las pensiones) sea inferior al IPC previsto (2,1%), la diferencia se consolidará a favor de los pensionistas.

Instrucciones

"Hemos recibido instrucciones del presidente del Gobierno, José María Aznar, en este sentido", aseguró Arenas, quien matizó, no obstante, que habrá que esperar a los datos de IPC de octubre y de noviembre para confirmar esa posibilidad. Arenas añadió que, si se confirma la caída del IPC, los pensionistas ganarán poder adquisitivo por tercer año consecutivo.El pasado año, la evolución de los precios y sus efectos sobre las pensiones dieron lugar a la polémica. La Ley de Consolidación y Racionalización del Sistema de la Seguridad Social (Pacto de Toledo) prevé la posibilidad de sumar o descontar a las pensiones las desviaciones del IPC.

En 1997, el Gobierno barajó la posibilidad de descontar a los pensionistas la desviación del IPC, si bien, posteriormente, rectificó.