El Ayuntamiento cerrará el cámping de El Saler a final de año

El cámping municipal de El Saler recibió ayer su sentencia de muerte. El gobierno del PP en el Ayuntamiento de Valencia, que aprobó la tercera modificación de créditos del ejercicio, acordó destinar 24 millones de pesetas para gastos de "preliquidación" de la instalación. La decisión ha motivado el rechazo de los usuarios de la instalación, ubicada en el parque natural de l"Albufera, la preocupación de los trabajadores y los recelos de la oposición, que ve en el cierre un medio para favorecer iniciativas privadas en el sector. El delegado de Hacienda, Alfonso Grau, que justifica el cierre porque "existen suficientes plazas de cámping en la zona" y porque el Ayuntamiento "no puede dedicarse a los negocios de hostelería", aseguró ayer que existe "garantía absoluta del mantenimiento de los puestos de trabajo". Además, criticó a la oposición por defender los "privilegios" de los campistas fijos, aseguró que "no existe ningún cámping en el mundo en el que existan derechos de titularidad" y consideró "inadmisible" la figura del "campista estable con derecho a agua, luz y alcantarillado a cargo del presupuesto público". Los terrenos se devolverán al parque natural y los edificios en buen estado se destinarán a aulas de naturaleza.