Los municipios cercanos a Vandellòs cobrarán el canon de Enresa

El Ministerio de Industria y Energía ha modificado los criterios por los cuales los municipios cercanos a centrales nucleares reciben una compensación económica a cambio del almacenamiento de los residuos de alta actividad (el combustible gastado) en las mismas instalaciones. Este cambio permitirá a los cinco ayuntamientos del área de Vandellòs I (Baix Camp), en proceso de desmantelamiento, percibir una cantidad fija de 80 millones de pesetas anuales al considerarse la central como un residuo en su totalidad.

Asimismo Industria ha ampliado el número de poblaciones que podrán recibir estas ayudas. El reparto de los fondos de la Empresa Nacional de Residuos Radiactivos (Enresa) tiene como objetivo compensar económicamente a los municipios por el riesgo que supone tener en su zona una central nuclear. Estas cantidades se calculan a partir de un coeficiente según el número de metros cúbicos de uranio irradiado -es decir, el combustible ya gastado- que se almacena en las piscinas de las plantas, y de la distancia del pueblo respecto a la central. Sin embargo, a raíz de la clausura de Vandellòs I se planteó el conflicto de que los ayuntamientos próximos a ésta no podían percibir ninguna cantidad pues en sus instalaciones ya no había residuos de alta actividad. El uranio natural de esta planta se ha trasladado a Francia para reprocesarlo, por lo que desde noviembre de 1994 los consistorios tan sólo reciben el canon de Enresa correspondiente a la central Vandellòs II, en funcionamiento. La nueva orden ministerial ha incluido en los fondos de Enresa el concepto de central nuclear en proceso de clausura o desmantelamiento, permitiendo así que los municipios situados en un radio de ocho kilómetros puedan percibir una compensación económica cifrada en 80 millones de pesetas anuales. De este modo, los ayuntamientos de Vandellòs, Pratdip, Tivissa, Montroig y L"Ametlla de Mar se repartirán este año 73 millones de pesetas, una cantidad inferior debido a que Enresa no se hizo cargo de Vandellòs I hasta el pasado mes de marzo. La nueva reglamentación también amplía el número de municipios que podrán percibir el canon de Enresa, cumpliendo así una sentencia de la Audiencia Nacional que consideraba ilegales los criterios fijados por el Ministerio de Industria. Hasta ahora sólo tenían derecho a las compensaciones los ayuntamientos cuyo núcleo principal de población estaba situado en un radio de 10 kilómetros de la central, por lo que quedaban excluidas las pedanías o las entidades menores. A partir de la orden ministerial, este radio se sitúa en los 20 kilómetros y se suprime el criterio de núcleo principal de población. Hasta la anterior normativa, tan sólo 42 ayuntamientos de la provincia de Tarragona tenían derecho a cobrar el canon de Enresa. Este número se ha ampliado hasta 48 municipios. Del área de Ascó los beneficiados son un total de 35, que se repartirán 384 millones de pesetas, mientras que en la zona de Vandellòs II la cantidad se fija en 391 millones, que se distribuirán en tan sólo 13 ayuntamientos. Este año Enresa pagará a los 173 ayuntamientos cercanos a centrales nucleares y al cementerio de residuos de El Cabril (Córboba) un total de 2.983 millones de pesetas.