Los propietarios del barco, en libertad tras pagar la fianza

VIENE DE LA PÁGINA 1 Las autoridades municipales aseguran que no han detectado jamás sobrecarga alguna en los cruceros turísticos, aunque tampoco consta que tales inspecciones específicas se llevaran a cabo. El alcalde de Banyoles admitió, no obstante, que el Ayuntamiento debía inspeccionar toda posible sobrecarga en las embarcaciones del lago. "Con el reglamento en la mano", aseguró Solana, "no había que comprobar cada día la carga de las barcas". El alcalde puntualizó ante la juez las declaraciones efectuadas a la prensa según las cuales la vigilancia del lago había fallado. Solana matizó que las inspecciones eran cuidadosas y frecuentes. "Me hubiese gustado que la policía municipal hubiera pasado por allí y hubiera visto que el barco se iba a sobrecargar", afirmó. Gayolà y Rodríguez, propietarios y patronos de L"oca, depositaron ayer la fianza de cinco millones cada uno de ellos que les permitirá eludir la cárcel en espera de juicio. Ambos están acusados de 20 homicidios por imprudencia. La prueba pericial de la embarcación encargada por la juez se realizará en dos fases: la primera antes de retirar el catamarán del lago y la segunda mediante una inspección más pormenorizada en un hangar del aeropuerto de Girona. Con toda probabilidad, la embarcación propiedad de la otra empresa de cruceros turísticos que opera en el lago reanudará esta misma semana sus paseos. Mientras tanto, el presidente del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña, Guillem Vidal, calificó ayer de correcta la actuación de la juez que instruye el caso y destacó que no existe ningún problema en relación con el Ayuntamiento. La juez instructora se limitó a comunicar al alcalde que era libre de encargar los informes que creyera oportunos sobre irregularidades administrativas, pero que ella era la autoridad judicial encargada de las pruebas periciales.