El PP cambiará el sistema de concesión de farmacias para primar a los parados

El Grupo Parlamentario del PP cree que este proyecto de ley puede mejorarse. Su portavoz de Sanidad, Javier Rodríguez, afirma: "Hay que dar más puntos a los parados, a los discapacitados y a los jóvenes". El diputado reconoce que el sistema de baremación del Gobierno no asegura a éstos la obtención de una farmacia.Por su parte, el PSOE presentará una enmienda a la totalidad del proyecto de ley, "porque el Gobierno ha logrado no contentar a ninguno de los sectores afectados". Por ello, el portavoz socialista en Sanidad, Lucas Fernández, propugna una "liberalización planificada" de las farmacias. Propone un nuevo baremo de méritos que prime a los "farmacéuticos que no hubieran estado nunca establecidos como titulares con oficina de farmacia o que lo hubieran estado en municipios de menos de 500 habitantes".

Fernández anuncia también que su partido pretende que se suprima por completo el número de vecinos (2.800) que deben rodear, según la ley, a una nueva botica. "Es suficiente que las oficinas de farmacia estén separada 250 metros", dice el diputado. El PSOE está también a favor de mantener la actual situación de venta libre de farmacias, "porque son empresas privadas" y "el mercado se regulará por sí solo", explica. Un argumento que coincide con la postura del presidente del Colegio de Farmacéuticos de Madrid, José Enrique Hours, quien se resiste a que los licenciados pierdan la prerrogativa.

Mariano Gamo, portavoz de IU, avanza que su coalición propugna la apertura de farmacias públicas en todos los centros de salud. "Lo lógico", señala, "es que el paciente pueda comprar dentro del centro lo que le acaban de recetar. Los beneficios de los farmacéuticos, cercanos al 30%, quedarían así en la Administración, y se podrían abaratar costes. Si alguien pertenece a un seguro privado, que compre las medicinas en una farmacia privada".

IU presentará también una enmienda para que los boticarios pierdan su farmacia al cumplir los 70 años. "Como se trata de una concesión pública, el permiso debe volver a la Administración. No es lógico que las farmacias, que se ganan en un concurso, vayan pasando de padres a hijos durante generaciones. Un boticario puede estar muy preparado, pero su hijo puede ser un zoquete", añade.

IU pedirá que los farmacéuticos que ya tienen botica no puedan presentarse a concursos. "El sistema del PP, dar más puntos en los baremos a los farmacéuticos con más cursillos, sólo beneficia a los grandes farmacéuticos: los que pueden contratar sustitutos. Ellos son los únicos que tienen tiempo para asistir a cursillos". IU cree que, cuando se cree el sistema público de farmacias en todos los centros sanitarios, se podrá liberalizar la apertura. "Vivimos en una sociedad de libre mercado", reconoce el comunista Gamo.