RTVE presenta un presupuesto para 1999 en el que los gastos triplican a los ingresos

El director general de RTVE, Fernando López-Amor, envió ayer el anteproyecto de presupuestos para 1999 al Consejo de Ministros y simultáneamente lo presentó a los medios de comunicación. Anunció un presupuesto "contenido" de 266.209 millones de pesetas, en el que los gastos (252.201 millones) triplican los ingresos (84.323). Las pérdidas previstas ascienden a 167.878 millones, el doble de los ingresos, por lo cual el Ente habrá de endeudarse en otros 171.873 millones. No obstante, López-Amor vaticinó "un futuro espléndido" para RTVE. Eso sí: si el Parlamento no aprueba un nuevo marco financiero, "el endeudamiento acumulado será de 765.243 millones a finales de 1999".

Antes de abordar las magnitudes económicas, Fernando López-Amor justificó ante los medios de comunicación lo apresurado de la convocatoria. Dos motivos causaron la premura. Por un lado, hasta el pasado jueves "no se terminó de imprimir el anteproyecto" y, por tanto, sólo ayer mismo "era posible entregar un ejemplar a la prensa". Además, puesto que ayer mismo fue entregado el anteproyecto al Consejo de Ministros, López-Amor no quiso filtraciones individuales: "He querido que todos ustedes se enteren de forma colectiva".La exposición económica se desarrolló bajo la premisa de que RTVE es "el primer grupo audiovisual español y está en crecimiento", y, pese a la falta de un escenario financiero estable, "tiene un futuro espléndido". De momento, a la espera de lo que se decida en el Congreso de los Diputados, las pérdidas previstas para 1999 rozarán los 168.000 millones de pesetas y al Estado se le pide una subvención directa similar a la del ejercicio en vigor: 11.043 millones.

De los 266.209 millones presupuestados (30.000 millones más que en 1998), 252.201 corresponden a gastos corrientes y 14.008, a inversiones. López-Amor dividió en dos el capítulo de gastos. De un lado, el gasto operativo de explotación, es decir, el gasto corriente menos las indemnizaciones de la regulación de empleo y los gastos financieros.

Los gastos "derivados de la financiación bancaria transitoria" suman 47.138 millones, mientras que las indemnizaciones de la regulación de empleo ascienden a 6.391 millones. Según López-Amor, estas dos partidas, que copan el 21% del presupuesto de explotación, "son las principales causas del incremento del gasto".

Compras e inversiones

El capítulo de compras, que incluye la adquisición de derechos, aumenta un 11,32%, "lo que nos permitirá mantener el liderazgo y consolidar nuestra oferta internacional con TVE Internacional, el Canal 24 Horas Todo Noticias e Hispavisión", apuntó el director general. En cuanto a los gastos de servicios exteriores -comisiones de agencia, propiedad industrial, Retevisión, satélites...- crecen un 5,77%.Donde no hay crecimiento es en los gastos de personal. Excluyendo las indemnizaciones mencionadas, se reducen un 3,07%, aunque la masa salarial se eleva un 1,8% "conforme a las previsiones marcadas para todo el sector público".

Frente a los 252.201 millones de gastos estimados, la partida de ingresos sólo alcanza los 84.323 millones y superan en 5.309 (un 6,72%) el presupuesto de 1998. Los ingresos contemplan un apunte no habitual: 1.300 millones, en virtud de los acuerdos suscritos por RTVE con las comunidades autónomas para potenciar su emisión territorial.

A lo largo de 1999 RTVE tiene previsto invertir 14.008 millones. De ellos, 3.740 en Vía Digital, plataforma de la que es uno de los principales accionistas con un 17% del capital.

Las primeras reacciones a la comunicación de estas cifras se produjeron entre los partidos de la oposición. Rosa Conde, portavoz del PSOE en la Comisión de Control de RTVE, tachó el anteproyecto de "tomadura de pelo" y subrayó que el Gobierno "ha incumplido su promesa de asumir ciertos compromisos para mejorar el futuro de RTVE". Felipe Alcaraz (IU) afirmó que las cuentas de López-Amor "supondrán en la práctica la voladura de RTVE", ya que "tenía que haber pedido al Gobierno 150.000 millones y no escudarse en la subcomisión parlamentaria".

Comisiones Obreras, por su parte, lamentó que no haya más financiación pública y calificó de "fraude" el "repartir buenas palabras, mientras se entrega a nuestros liquidadores el argumento de una deuda inabordable que justificará medidas desmanteladoras.