Sólo uno de cada tres vascos se siente libre para hablar de cuestiones políticas en público

El 76% de los vascos no se siente libre para hablar y discutir en público sobre cuestiones políticas, según el Euskobarómetro, que constanta también un significativo aumento del temor a participar activamente en política respecto a 1995. Por otro lado, el 62% de los ciudadanos comsidera que la situación económica es mala o regular. El paro continúa siendo la preocupación primera, seguida de la violencia, de los vascos, que se muestran muy críticos con las instituciones y se consideran mayoritariamente de izquierdas, según los resultados de este estudio sociológico.

La percepción de falta de libertad para hablar de política con todo el mundo se mantiene en los mismos niveles que hace un año, según el trabajo que realiza del Departamento de Ciencia Política de la Universidad del País Vasco correspondiente al mes de junio. El 42% de los encuestados señala que sólo se atreve a discutir de estas cuestiones con algunas personas, situación que se da sobre todo entre entre los votantes de Herri Batasuna, Eusko Alkartasuna e Izquierda Unida. Además, hay un 21% que no se atreven a hacerlo con nadie o casi nadie, predominando este sentimiento entre los votantes del Partido Popular y del PSE-EE. Por otro lado, esta oleada de primavera del Euskobarómetro, realizada el pasado mes de junio sobre 1.400 entrevistas a domicilio, recoge un aumento del temor a participar en política. Dos de cada tres vascos (el 65%) dicen percibir mucho o bastante miedo a intervenir activamente en la vida pública. Esta sensación ha aumentado catorce puntos en los últimos tres años. Los más afectados son, por este orden, los votantes del Partido Socialista de Euskadi (74%), Partido Nacionalista Vasco (70%), PartidoPopular (68%) e Izquierda Unida (65%). Frente a ellos, tres de cada diez dicen no percibir tal sensación, lo que se da sobre todo entre los votantes de Herri Batasuna y Eusko Alkartasuna. Por el contrario, este grupo se ha reducido en diez puntos en el mismo periodo. Pesimismo político En paralelo a esta situación, casi la mitad de los vascos (46%) piensa que la situación política en Euskadi es mala o muy mala. Esta opinión negativa es casi diez puntos superior a la que se da respecto a la situación en España (37%). A estos hay que añadir cerca de otro 39% que la ve regular. Por el contrario, únicamente el 8% cree que la situación política vasca es buena. Para algo más de ocho de cada diez vascos (83%) el paro continúa siendo el problema número uno del País Vasco, mientras que la violencia y el terrorismo ocupan la segunda posición en la relación de las preocupaciones de la mayoría de los vascos. Las drogas, las desigualdades sociales y los recortes del bienestar (salud, crisis, medio ambiente, etc.), junto con la seguridad ciudadana les siguen en el orden de prioridades, un esquema que se mantiene desde el último año. En lo que respecta a la situación económica, el estudio refleja una mejora sensiblemente de la opinión de los vascos, en sintonía con la marcha favorable de los indicadores. No obstante, el 62% estima que la marcha de la economía en la comunidad autónoma, una percepción que es más desfavorable todavía sobre la economía española (68%). En cambio, se incrementa significativamente el número de optimistas, que suben al 26% y 35%, respectivamente, mientras que los pesimistas se reducen hasta dos de cada diez. Suspenso al Gobierno Aznar La mayoría de los ciudadanos -en concreto, siete de cada diez encuestados-, estima que el Parlamento están alejado de lo que sucede en la calle y no refleja los intereses de los ciudadanos. Esta opinión es predominante entre los votantes de todos los partidos, pero está más atenuada en los que apoyan al PSE y al PNV. El Gobierno del PP recibe un rotundo suspenso por parte de los vascos. Para un 42% la gestión de los dos años del Gabinete de José María Aznar está siendo negativa, frente a un 18% que la considera positiva, mientras que un 34% se se sitúa en una posición neutra. Sólo los votantes del PP la aprueban (72%), mientras que los más críticos son los electorados de izquierda. Además, este juicio ha ido a peor en el último año, al incrementarse seis puntos la valoración negativa y reducirse tres la positiva. En cuanto a las próximas elecciones autonómicas del 25 de octubre, el 75% de los vascos cree que el partido vencedor será el PNV, una percepción que se da entre los votantes de todos los partidos. Sin embargo, sólo el 25% desea que suceda así, frente aun tercio que prefiere otras opciones y un 42% que no se pronuncia. La posición de centro-izquierda es en la que más se autoidentifican los ciudadanos de Euskadi. Los vascos se sitúan en una puntuación media de 4 en la escala de izquierda-derecha que va de 1 a 10 puntos. Cuatro de cada diez ciudadanos se ubican entre el 4 y el 5, donde se podría unicar el centro-izquierda, otro 24% entre el 2 y 4, que sería la izquierda, mientras que un 8% se define de extrema izquierda. Frente a estos resultados, sólo un 12% se sitúa en posiciones de derecha, moderada o extrema, mientras que otro 13% no se define. Por electorado, los votantes de Herri Batasuna obtienen un promedio de 2.1, los de IU un 3, los del PSE-EE un 3.6, los de EA un 3.9, un 4.6 los del PNV, mientras que los del PP se sitúan en una posición media del 6.4. Ánimo estable Por otro lado , la oleada de primavera del Euskobarómetro recoge un estancamiento en las expectativas personales de los vascos respecto al año anterior. para algo más de seis de cada diez vascos, 1997 ha sido un buen año en lo personal, mientras que uno de cada diez piensa lo contrario y para cada uno de cada cuatro no ha sido bueno ni malo. Para este año, el 44% espera que las cosas le vayan mejor, otro 41% igual y sólo un 8% peor, manteniéndose las mismas expectativas de hace un año.