Barranco: "Ruiz-Gallardón toma la Casa de Campo por interés económico"

El portavoz socialista en el Ayuntamiento, Juan Barranco, ve "intereses económicos" en la decisión de la Comunidad de asumir las competencias para decidir sobre lo que se construya en un futuro en la Casa de Campo. "Lo que persigue Ruiz-Gallardón es potenciar el parque de atracciones en San Martín de la Vega en detrimento del que ya existe en la capital", añadió. El Gobierno regional ha decidido declarar bien de interés cultural la Casa de Campo, con lo que pasa a su jurisdicción.

En la sesión del consejo de Gobierno del jueves, el ejecutivo de Ruiz-Gallardón aprobó declarar la Casa de Campo, propiedad municipal, bien de interés cultural, la máxima figura de protección que existe en el ámbito regional.Cualquier reforma que se quiera emprender en este extenso parque deberá pasar antes el examen autonómico y no se podrá ejecutar sin el permiso de la dirección general de Patrimonio de la Comunidad de Madrid.

El Ayuntamiento ha anunciado repetidamente que el parque de atracciones, enclavado en un esquinazo de la Casa de Campo, va a experimentar una completa transformación. La reforma interior del recinto de ocio ya ha sido aprobada por el pleno municipal. Pero los gestores del Parque de Atracciones pretenden mejorar los accesos y construir un tren monovía que discurra desde el recinto ferial hasta la entrada del complejo de ocio. Este proyecto sólo requería el permiso del Ayuntamiento. Pero ahora necesitará también que la Comunidad dé su visto bueno.

A Barranco la "maniobra" del ejecutivo regional le parece sospechosa. Por eso recordó ayer que uno de los proyectos emblemáticos del Gobierno de Ruiz-Gallardón "es el parque temático de San Martín de la Vega".

"Gestión de las misas"

"No se le oculta a nadie que lo que persigue la Comunidad no es proteger el medio ambiente, sino potenciar su parque de atracciones y arrinconar el de la Casa de Campo", añadió Barranco, "y esto es perjudicial para los madrileños". "A mí lo que más me enfurece es que este alcalde, con su posición autista, se deja robar todo. A este paso, se va a quedar sólo con la gestión de las misas de la Almudena", concluyó el dirigente socialista.Un responsable regional evitó replicar a Barranco, aunque le extrañó que el portavoz socialista no se alegrase con la decisión de aumentar la protección de la Casa de Campo para evitar que se perpetren proyectos urbanísticos en el interior del parque.

El alcalde, por su parte, no quiso entrar en la polémica: "No existen enfrentamientos entre la Comunidad y el Ayuntamiento", se limitó a decir. Franco González, concejal de la coalición Izquierda Unida, afirmó que "poner a la Comunidad a vigilar la Casa de Campo es como poner a la zorra a cuidar de las gallinas".