Vizcaya pagará diez años de alquiler a 15 familias bilbaínas que perderán sus casas

La Diputación de Vizcaya pagará durante 10 años el alquiler que abonan actualmente 15 de las 30 familias bilbaínas que deberán ser desalojadas de sus pisos por la ampliación de los accesos a través del barrio de Deusto. A las otras 15 familias afectadas, que poseen su vivienda en propiedad, se les pagará el valor en que se tase el inmueble. Las indemnizaciones se deben a la construcción de la variante baja de Deusto, con un túnel subterráneo que obligará a cambiar una estación de tren y suprimir instalaciones de un colegio.

El nuevo acceso que unirá el alto de Enekuri con el puente Euskalduna, atravesando el barrio de Deusto, es uno de los proyectos viarios más complejos de la Diputación vizcaína. Primero, porque obligará al derribo de 40 viviendas en el inicio del alto de Enekuri y, en segundo lugar, la construcción de un túnel en el centro de Deusto afectará al colegio de La Salle, que perderá un campo de balonmano, un frontón y parte de sus aulas, y a la estación de ferrocarril de Eusko Tren, que deberá trasladarse. Además, las obras destruirán conducciones de gas, servicios eléctricos, líneas telefónicas y redes de abastecimiento de agua del barrio. Todo ello elevará el coste de las expropiaciones a 1.800 millones en un proyecto que requerirá casi 6.200 millones. El futuro de los afectados ya ha sido diseñado por la Diputación: los 15 dueños de sus pisos percibirán el valor de su casa, según la tasación que se realice; las otras 15 familias que son inquilinas cobrarán una cantidad total equivalente a 10 años del alquiler actual que pagan, con las correcciones del IPC correspondientes. La Diputación vizcaína ha descartado realojar a los afectados en otros pisos. "Darles dinero es lo más práctico y nunca hemos tenido problemas por las cantidades", señala el diputado de Obras Públicas, el peneuvista José Félix Basozabal. Sin embargo, los vecinos ya han mostrado su malestar por las consecuencias económicas, familiares y sociales de las expropiaciones. Basozabal prevé que en noviembre se inicie la negociación individual con los vecinos -"hay 30 problemas y cada uno hay que tratarlo personalizadamente"-, aunque antes la Diputación deberá asumir la gestión de las expropiaciones. "La obra la paga la Diputación, pero la expropiación correspondería al Ayuntamiento. Sin embargo, para adelantar los plazos hemos pedido asumirla nosotros y el Ayuntamiento resolverá esta cuestión en octubre". El titular de Obras Públicas baraja la conclusión de los trámites expropiatorios en marzo: "Luego será el concurso de obras para colocarnos con las máquinas en el primer semestre de 1999". La variante baja de Deusto, cuyo plazo de ejecución es de dos años y medio, es uno de los pilares del plan de accesos de Bilbao. El otro, los túneles de Artxanda, ya adjudicado con un coste de 15.000 millones, empezará a realizarse a principios de 1999.