España se aleja de la "zona euro" por el aumento de la inflación

La evolución de los precios en los últimos meses, y en especial el tirón registrado en julio, han alejado a España del grupo de países de la zona euro, especialmente Francia y Alemania, que demuestran tener un mayor control de la inflación. Economía aseguró ayer que mantiene el objetivo de reducir el diferencial y justificó el distanciamiento acentuado el mes pasado en el mayor crecimiento económico de España.

El Gobierno reconoce que los países de la zona euro tienen ventaja pero, en términos ciclistas, no admite que esa ventaja acabe en escapada. Según afirmó ayer el secretario de Estado de Economía, Cristóbal Montoro, España "aspira a reducir el diferencial con la zona euro [en materia de inflación]". La prueba, el objetivo de precios establecido en el cuadro macroeconómico de 1999: el 1,8%.Y además de la voluntad, una justificación. Según Montoro, es hasta cierto punto lógico que España tenga una inflación más elevada que sus socios más aventajados por la sencilla razón de que la tasa de crecimiento de la economía española (en torno al 3,8%) también es más elevada que la de los países de nuestro entorno, lo cual explica las presiones inflacionistas y hasta el afán por incrementar márgenes de las empresas, tras lo que Montoro definió como "épocas duras".

Descensos en Europa

Por ello, según Economía, "no puede hacerse una comparación mimética" entre los niveles de precios que registran países como Alemania y Francia -competidores directos de España- y los que registra España.Pero al margen de las explicaciones sobre coyuntura, el hecho es que en julio, la inflación bajó en Francia un 0,4% y subió un 0,3% en Alemania, lo que sitúa sus tasas acumuladas en los últimos 12 meses en el 0,8% y el 0,9%, respectivamente, frente al 2,2% de España.

Los precios se mantuvieron estables en Italia el mes pasado e incluso bajaron un 0,3% en Irlanda, país que, no obstante, supera a España en la tasa interanual de inflación.

Las justificaciones del Ministerio de Economía y Hacienda fueron contestadas de forma contundente por el portavoz adjunto del Grupo Parlamentario Socialista, Luis Martínez Noval.

El ex ministro de Trabajo destacó que el diferencial de inflación de España con Francia se sitúa en estos momentos en el 175% "o lo que es lo mismo, multiplicamos por 2,5 su inflación", lo que tiene gran trascendencia dado que la economía española compite directamente con la francesa.

"En Francia y en Alemania también es verano", señaló Martínez Noval, contestando así al calificativo de "estacional" aplicado por Economía al incremento del IPC registrado en julio.

En opinión del portavoz socialista, el aumento de los precios en el mes de julio es "sencillamente desastroso", hasta extremos que se puede calificar de "momento histórico, como le gusta decir al Gobierno, pero por lo negativo". A tal situación, añadió, han contribuido las liberalizaciones emprendidas en algunos sectores por los Ministerios de Industria y de Fomento, que en su opinión han sido "un puro maquillaje". La prueba de que no se han conseguido los objetivos que se perseguían es que los precios, según Martínez Noval, siguen subiendo "en un entorno económico inmejorable" y con los precios de la energía primaria en niveles mínimos.

Desde el principal partido de la oposición se considera necesario que el Gobierno reconsidere el proyecto de reforma del IRPF que entrará en vigor el próximo año, porque puede añadir leña al fuego de los precios, en una espiral sobre la que han advertido los servicios de estudios de entidades como el BBV y Argentaria.

Ayer mismo, entidades como Banesto advertían que el aumento de la renta disponible puede ser un factor importante de presión sobre los precios a medio plazo.