Una mujer muere aplastada por el brazo del aparato de rayos X con el que se le practicaba una radiografía
Una mujer de 66 años -C. G. R.- murió el pasado martes por la noche en la Ciudad Sanitaria de Bellvitge (L"Hospitalet de Llobregat) al caerle encima el brazo articulado del aparato de rayos X con el que acababa de practicársele una radiografía. Tanto la dirección del hospital como los responsables del Instituto Catalán de la Salud (ICS) negaron ayer cualquier responsabilidad en el accidente. El Juzgado de Instrucción número 1 de L"Hospitalet de Llobregat ha abierto una investigación.La mujer había ingresado en el hospital de Bellvitge alrededor de las diez de la noche, a causa de un aumento de la fiebre relacionado con la enfermedad crónica que padecía. La directora médica del hospital, Rosa Ramón, explicó ayer que tras su ingreso se decidió practicar a la mujer algunas pruebas, entre ellas una radiografía en el tórax, por lo que fue trasladada al servicio de radiología. La radiografía llegó a realizarse poco antes de que parte del aparato se desplomara sobre la mujer.
El director de la división de hospitales del Instituto Catalán de la Salud, Josep Navas, explicó la secuencia de esos fatídicos momentos: "La técnica estaba en la sala de control e hizo la radiografía correctamente. Entró en la sala de exploración, de la que debe permanecer fuera durante la operación por razones de seguridad, y cuando abrió las puertas vio que la paciente estaba comprimida. El brazo se había desplazado, pero nadie lo vio". Y añadió: "Con la información que tenemos no se detecta ningún fallo humano".
Inmediatamente intervino el equipo de reanimación del hospital, pero ya no había nada que hacer. El brazo de la máquina -que pesa entre 150 y 160 kilos- había aplastado el pecho de C. G. R. "La muerte fue casi instantánea", indicó la directora médica del centro.
El aparato en cuestión, un Televix-1600 de la compañía General Electric, fue adquirido por el hospital de Bellvitge en 1983 y era el único de este modelo que había en el centro. Este modelo tiene un programa de mantenimiento que estipula dos revisiones generales anuales. La última revisión se realizó los días 3 y 4 de febrero y no se detectó ninguna anomalía. El servicio de mantenimiento que hace la empresa incluye la presencia permanente de un técnico en el hospital durante ocho horas diarias.
