Los vecinos se rebelan contra un centro de toxicómanos

Cada tarde, desde hace una semana, una treintena de vecinos del barrio de Vista Alegre, en Carabanchel, se parapetan delante de un local en la calle de Matilde Hernández, 99, donde la Agencia Antidroga de la Comunidad quiere abrir un centro de acogida para toxicómanos. Con su actitud impiden el paso a los miembros de la asociación Arco, que gestionará el servicio. Por ahora no ha habido incidentes, ya que los profesionales se han resignado a no entrar aún al inmueble.

Medio millar de vecinos se manifestaron el martes contra la apertura del recinto, que abriría de ocho de la tarde a ocho de la mañana todos los días y en el que los drogodependientes podrían descansar, comer un bocadillo, lavar su ropa o recibir atención social y sanitaria. Desde hace tres años existe otro centro municipal similar en la calle de Fúcar (Centro).

"No nos oponemos a este tipo de dispensarios, pero éste no es un lugar adecuado, rodeado de pisos y comercios. La Comunidad tiene mejores ubicaciones, como la finca de Puerta Bonita", aseguran los manifestantes.