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Núñez compra a Tabacalera la antigua sede de Tabacos de Filipinas por 1.800 millones para transformarla en un hotel

La constructora Núñez y Navarro, propiedad del presidente del Fútbol Club Barcelona, Josep Lluís Núñez, ha adquirido a Tabacalera el edificio que albergaba la sede de la Compañía de Tabacos de Filipinas, en Barcelona, por un total de 1.800 millones de pesetas. El objetivo de la constructora es convertir el inmueble en un hotel. El edificio tiene una superficie de 12.500 metros cuadrados. Núñez y Navarrro tiene previsto invertir otros 1.700 millones de pesetas para rehabilitar el edificio y convertirlo en un establecimiento hotelero, que será explotado por la empresa propiedad de Núñez, informaron fuentes de la constructora. El edificio está catalogado como patrimonio histórico artístico de Barcelona, dada la singularidad de su arquitectura y acabados y su ubicación, en la confluencia de La Rambla con la calle del Pintor Fortuny. Al estar protegido por las normativas urbanísticas, ninguna de las fachadas del inmueble -construido en el año 1880 y rehabilitado sucesivamente en 1929 y 1935- puede ser derruida ni modificada. Tampoco pueden sufrir modificaciones el acceso interior al inmueble ni su planta principal. El plan para convertir el edificio en un hotel reforzará la nueva imagen de la parte alta de La Rambla. Esta zona es uno de los polos de atracción del turismo y se ha transformado en los últimos años con la apertura de varios hoteles. Tabacalera adquirió a la Compañía de Tabacos de Filipinas su sede social por 1.400 millones de pesetas cuando esta empresa formaba parte del grupo. Hace cuatro años, cuando se desprendió de su filial, decidió mantener la propiedad del inmueble, parcialmente alquilado. Negociación con inquilinos Precisamente, ha sido la negociación con los inquilinos que ocupaban los locales comerciales del edificio uno de los escollos que han prolongado durante meses el cierre de la operación de venta del inmueble. Por el singular edificio pujaban otras dos empresas, también con la intención de convertirlo en hotel dado el auge turístico que experimenta la zona. El edificio será el quinto hotel propiedad de Núñez y Navarro, que ya tiene otros cuatro establecimientos de esas características en la ciudad de Barcelona. La venta de la antigua sede de la Compañía de Tabacos de Filipinas se enmarca en el proceso abierto por Tabacalera para desprenderse de los inmuebles que no afectan a su negocio. La primera desinversión se produjo la pasada semana, cuando la empresa vendió a Caja Madrid un edificio por 1.500 millones de pesetas.

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