El concurso de piano Paloma O'Shea celebra sus 25 años

Un equipo de técnicos y un músico viajaron a París, Berlín, Londres, Nueva York y Madrid en febrero y marzo grabando las interpretaciones de más de un centenar de jóvenes pianistas de todo el mundo. Los vídeos fueron después observados por el jurado del Concurso Internacional de Piano de Santander que preside Paloma O'Shea. Los 20 elegidos participan en la edición del 25º aniversario.

Los concursantes de este año aterrizarán en Cantabria el próximo día 27 de julio y empezarán a tocar en el Palacio de Festivales de Santander ante los 12 miembros del jurado hasta la final del 6 de agosto.La presidenta de la Fundación Albéniz y pianista Paloma O'Shea se propuso hace un cuarto de siglo hacer algo para impulsar la enseñanza musical en España. Puso en marcha el concurso de piano, pero no se paró ahí. Hace 11 años empezó a organizar los Cursos de Verano en Santander, que este año agrupan clases de piano, cuerda, música de cámara y canto. Cuatro años después puso en marcha la que se ha convertido en una de las escuelas de perfeccionamiento de intérpretes mejores del mundo, la Escuela Superior de Música Reina Sofía.

"Intentamos que los alumnos se sientan como profesionales". Paloma O'Shea habla de lo difícil que resulta para los jóvenes concursantes estar sueltos en este tipo de pruebas. El certamen les da un buen empujón profesional, pero lo pasan muy mal. Intranquilidad, nervios, competitividad. Luchan contra todo tipo de sentimientos durante los 11 días que son escuchadas las cinco interpretaciones por cada uno de los miembros del jurado: Antoni Ros-Marbà, Sulamita Aronovsky, Claude Frank, Enzo Restagno, Dimitri Bashkirov, Gyorgy Sandor o Josep Colom, el único pianista español que ha ganado este concurso.

"En los concursos no siempre gana el mejor", dice O"Shea, "depende de las condiciones en las que estén los chicos en el momento o de los gustos del jurado. Ha habido grandes artistas en el mundo que no han pasado la segunda prueba del concurso y luego han sido unos maravillosos intérpretes".

A la convocatoria de este año va ligada una celebración, la del 25 aniversario del concurso. El próximo viernes se inaugurará, también en el Palacio de Festivales, una exposición con fotografías y partituras que hacen un recorrido por los principales acontecimientos y personajes que han pasado por el certamen en este tiempo.

El concurso tiene el premio más importante de esta clase de certámenes internacionales: seis millones de pesetas, y, lo que es quizá más importante, la celebración de unos 120 conciertos por todo el mundo. Por primera vez el público que asista a la final de este año, que está integrada dentro del Festival Internacional de Santander, podrá elegir a su concursante preferido. El escogido recibirá un equipo de música de dos millones de pesetas.