Un homenaje a Mahalia Jackson inaugura el Festival de Jazz de Vitoria

Por tercer año consecutivo, el Festival de Jazz de Vitoria se estrena esta noche con un concierto de música negra nacida en los coros de las iglesias, el gospel. Para esta edición, la vigésimo segunda, se ha programado un homenaje a la cantante que internacionalizó este género, Mahalia Jackson, a cargo del dúo formado por la vocalista Mavis Staples -antigua colaboradora de Prince- y Lucky Peterson al órgano Hammond. Los dos, mano a mano, desafían desde el escenario principal de este certamen, el pabellón de Mendizorroza (20.30 horas), a Ronaldo y compañía en la final del Mundial, con quienes compiten en horario.El festival de Vitoria nace este año bajo el reto de superar el recuerdo del anterior, que con la visita de Eric Clapton batió un récord de espectadores y atracción. No obstante, los organizadores confían en mantener la media de 25.000 visitantes en el festival. Su apuesta se ha volcado hacia artistas que han actuado antes en Vitoria, música latina y homenajes a viejas estrellas del jazz.

Habrá variedad en Vitoria. En Mendizorroza actuarán las estrellas consagradas. Entre los más reconocidos está el trío de figuras que se juntará en el concierto estelar: Tito Puente, Steve Winwood y Arturo Sandoval (día 16), unidos para su gira europea bajo el nombre de Latin Traffic Jam. De telonero ejercerá un pianista prometedor, Brad Mehldau. El cartel reúne dos conciertos por cada día: una big band, la WDR de Colonia, junto con las hermanas Labèque por una parte, y el saxo de Joe Lovano por otra (todos ellos el día 14). Al día siguiente, la trompeta del joven Nicholas Payton coincidirá con la voz de Dee Dee Bridgewater recordando a Ella Fitzgerald.

El piano de McCoy Tyner y su banda latina subirán al escenario el día 17, al igual que Carles Benavent y Jorge Pardo, con su jazz flamenco. Para la traca final se ha programado al bluesman Taj Mahal y el bajista Marcus Miller, el próximo sábado. Pero habrá más. En el teatro Principal, el jazz de culto y de las promesas, un concierto pedagógico para niños, una brazz band animando las calles de la ciudad y música de medianoche en los conciertos de los hoteles.