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Cartas al director
Opinión de un lector sobre una información publicada por el diario o un hecho noticioso. Dirigidas al director del diario y seleccionadas y editadas por el equipo de opinión

Visita ministerial

Recientemente, ministros del Gobierno del España va bien estuvieron en Andújar para asistir a la convención que el PP celebraba, imagino, para dar ánimos y consignas a sus "cuadros de cara al próximo curso que tras el COUU (Curso de Oposición Ultrajante a Ultranza) concluirá con la selectividad de junio que intentarán aprobar a fuerza de "utrerazos". Vergüenza debían sentir quienes se dicen defensores de la libertad de expresión cuando el 27 de junio veo en TVE-1 y Antena 3 el tratamiento informativo que dan a los ministros de Trabajo y Agricultura. A estos medios de comunicación, uno público ¿y plural? y el otro de otros y Sáenz de..., únicamente les interesa que se conozca la gestión ¿positiva? del PP. Para nada tienen en cuenta la Primera y Antena 3 que los ministros entraron por la puerta de servicio del hotel y no pudieron grabarlos a los pies de las escaleras. Lo que la gente no sabe es que al Gobierno del PP lo esperaban cientos de personas que quieren saber cuándo van a solucionar sus problemas. Allí estaban y no salieron en la tele muchas familias a las que se les ha prometido algo que no se cumple. En Andalucía, Canal Sur sí puso lo que pasaba en las puertas del hotel y dentro, pues se informó de la presencia de los ministros y de las reivindicaciones ciudadanas. También ATV, Radio Andújar, los diarios provinciales y El País Andalucía lo reflejaron. Recordar que en Andújar seguimos sin poder ver Canal Sur 2 ni la otra televisión local. ¿Hasta cuándo vamos a aguantar los ciudadanos, que somos quienes elegimos lo que vemos, oímos o leemos, a quienes pretenden que sólo veamos, oigamos o leamos lo que se dicte de una forma u otra?- .

Juicio a un perro

¿Les suena aquello de que "la justicia es un cachondeo"? Seguramente al final de esta carta entenderán el comienzo de la misma. En la mañana del 6 de julio tenía lugar en la sala 17 del juzgado de lo Penal de Sevilla el juicio por la agresión que un perro tuvo hacia otro ocasionándole la muerte. Estas ceremonias, como sabrán, comienzan haciéndose la exposición de los hechos, momento en el que el señor fiscal, Francisco García Ingelmo, por la peculiaridad del caso supongo, y exento de la objetividad que su profesión exige, comenzó, ante el asombro de todos, a hacer muecas y gestos de desagrado; pareciese que le incomodaba atender este tema ya que, como apuntó sin ningún pudor en su resumen, que esperábamos y exigíamos legal y no personal, no es amante de los animales y el hecho de que ensucien las calles le provoca gran displacer. Por si su actitud aún no fuera lo suficientemente desdeñable, en mitad del acto ceremonial osó sacar el diario y olvidó que se encontraba en su lugar de trabajo para el que los allí presentes le retribuimos económicamente. ¿No les es fácil pensar que para este fiscal la justicia debe de ser un cachondeo? ¿Que qué ocurrió? Nada, absolutamente nada. La juez, que momentos antes, en el cumplimiento de su deber, había ordenado callar a dos de los presentes, no tuvo el más mínimo amago de invitarlo a que se desprendiera de la prensa y retomara su lugar como fiscal, de manera que sus colegas letrados tuvieron que sufrir el desprecio de no sentirse oídos por quien correspondía y el juicio llegó a su término sin más pena ni gloria. No, yo no deseo hacerme eco de la frase que encabeza esta carta, tampoco que la indignación, que no es poca, me lleve a generalizar, ya que las generalizaciones habitualmente inducen a error. Pero ¿se imagina que mientras le extraen las amígdalas el cirujano se concentre en los Mundiales de Fútbol que oye en su walkman porque a él lo de las amígdalas no le apetece mucho? Esta imagen que raya en lo patético y en el más contundente surrealismo es la que visualicé en la celebración del juicio ante la actitud, desprovista de respeto y de ética profesional, que mantenía el representante del Ministerio Fiscal.- .

Juego limpio

El 23 de mayo se disputó el encuentro de fútbol entre Colspe-Alcosa (Copa Federación, cadetes, grupo IX), el cual finalizó en el minuto 82, suspendido por el árbitro del mismo a consecuencia de los graves incidentes surgidos tanto fuera como dentro del terreno de juego, con el resultado de 1-2. Tal circunstancia no tendría la mayor relevancia, desde el punto de vista competitivo, a no ser porque al equipo del cual me honro en ser su entrenador (An Andalis) se le ha causado un gravísimo perjuicio y se encuentra en una absoluta indefensión, ya que el comité de competición resolvió la disputa de los ocho minutos restantes. Éstos no se han celebrado, al parecer, por una carta entregada por dirigentes del Club Alcosa, aduciendo su "temor" a que volvieran a repetirse los incidentes. Por supuesto no acudieron a la celebración de los dichosos ocho minutos, consiguiendo con ello que mi equipo, que acabó en primera posición, con el derecho a disputar la fase final, no pudiera hacerlo, al serles concedidos los tres puntos al Colspe, que se los adjudica sin la previa reunión del comité de competición. Una reflexión me permito: ¿es esto juego limpio? ¿Se pusieron los medios para que se celebrara el encuentro con las suficientes medidas de seguridad? Actitudes como la del Alcosa deberían ser fuerte y gravemente sancionables, por ello escribo con rabia, impotencia e indefensión. Alcosa, 0-Juego Limpio, 5.- .

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