Mubarak y el rey Hussein piden marcha atrás al plan del Gran Jerusalén
Los tres árabes con los que Israel mantiene relaciones -los líderes de Jordania, Egipto y la Autoridad Palestina- conminaron ayer desde El Cairo al jefe de Gobierno israelí, Benjamín Netanyahu, a que renuncie al proyecto de ampliación de Jerusalén, que amenaza con anexionar barrios del sector árabe de la Ciudad Santa. Así lo pidieron el rey Hussein, el presidente Hosni Mubarak, y el propio Yasir Arafat, en una mini cumbre celebrada en la capital egipcia.
"Jugar con Jerusalén es jugar con fuego", afirmó ayer el presidente de Egipto, Hosni Mubarak, desde El Cairo, en una seria advertencia dirigida a Israel, al que conminó a abandonar el proyecto del Gran Jerusalén, aprobado hace dos semanas por el Gobierno de Benjamín Netanyahu, con el que se pretende judaizar la Ciudad Santa, anexionándole barrios de la zona Este pertenecientes a los palestinos.Los tres líderes árabes acordaron también en esta reunión - la primera que se celebra desde el pasado mes de septiembre y que Israel contempló con indignación- reclamar a Israel el fin de la política de colonización, la clausura de los asentamientos, el fin de la confiscación de tierras y de la destrucción de casas de los vecinos musulmanes. Así como conocer con exactitud el estado de las negociaciones secretas que israelíes y palestinos llevan a término, desde hace más de un año, con la mediación de Estados Unidos.
Cumbre restringida
La celebración de esta cumbre restringida ha tenido sin embargo como principal objetivo empezar a coordinar ante el resto de la comunidad internacional la apertura de un debate y el camino hacia una conferencia multinacional -sin presencia de los países directamente afectados- a través de la que se desbloque el proceso de paz, congelado desde hace más de un año.El proyecto de esta conferencia internacional, impulsada por Mubarak, y el presidente francés, Jacques Chirac, tras su entrevista d el pasado mes de mayo en París, tiene la bendición y el apoyo de la Unión Europea, que trata de tomar el relevo de EEUU en la mediación de las negociaciones.
La celebración de la minicumbre de El Cairo ha sido airadamente acogida en Israel, donde portavoces de Netanyahu han reivindicado un vez más las conversaciones directas, cara a cara, con los palestinos, con la única presencia y colaboración de su aliado, Estados Unidos.
"No es una conferencia internacional lo que nosotros necesitamos, sino negociaciones directas con los palestinos", aseguraba ayer el consejero de Imagen y Relaciones Públicas, David Bar Illan, convertido una vez más en portavoz de Netanyahu.
La presión de la comunidad internacional, sin embargo, no parece afectar demasiado al primer ministro israelí, que ayer anunciaba la decisión de mantener cerradas al tráfico palestino las carreteras de máxima seguridad de la banda costera de Gaza, escenario la pasada semana de un tenso incidente entre el Ejército israelí y la policía palestina.
"Israel no aceptará la petición de los palestinos de abrir esta carretera, ya que ellos han recurrido a la violencia", afirmó tajantemente Netanyahu ayer con ocasión de la reunión semanal de su Consejo de Ministros, dando un carpetazo a la guerra de las carreteras y cerrándose en banda a un posible diálogo con la Autoridad Palestina con respecto a este tema, incumpliendo así el pacto de negociación efectuado previamente con el mediador norteamericano, Dennis Ross.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.