_
_
_
_
Fotonoticia:

Está chupado

Los habitantes de Bustillo del Páramo (León) tenían recelos ante un edificio con elementos y ventanas fabricados a base de PVC, material que, según Greenpeace, es muy tóxico y cuya combustión puede causar la muerte a quien se halle cerca. Así que hicieron las averiguaciones oportunas y se pusieron en contacto con la asociación de fabricantes de plásticos. Ni corto ni perezoso, su presidente, Jauma Mora, fue al pueblo el año pasado y, tras varias explicaciones, se puso a lamer la ventana para demostrar su inocuidad. "Y es ignífugo", remató.

Más información
Un comité de expertos advierte del peligro de hornear platos envasados con PVC

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_