El escaparate de los más jóvenes
El director español Santiago Lorenzo ilustra en gran medida uno de los propósitos fundamentales del festival Cinema Jove. En esta décimo tercera edición, el realizador ha presentado su primer largometraje Mamá es boba en la sección oficial (la única española) tras participar en anteriories certámenes con diversos cortometrajes. Es la consecuencia lógica de un festival cuyo origen fueron los cortos y en el que la sección oficial de este género (más de 70, procedentes de una treintena de países) ha vuelto a brillar con luz propia. En este sentido, se ha presentado en el festival el libro Cortometraje en españa, una larga historia de ficciones breves de Alessandra Amitrano.Mamá es boba ha sido recibida con división de opinones y no se perfila como una de las candidatas a obtener hoy el premio de tres millones de pesetas. Entre las 10 películas que concursan en esta sección oficial, que cada vez va adquiriendo mayor importancia, han predominado las óperas primas y los relatos urbanos que describen la realidad de los países natales de los realizadores (que no han de tener más de 35 años).
Además de otras actividades y de presencia del realizador Kevin Smith, cabe destacar el homenaje que se ha tributado al director francés de cine negro José Giovanni, de 75 años. Sus películas (algunas inéditas en España) han tenido una muy buena acogida entre el público.
Las distintas secciones de Cinema Jove han reforzado este año su singular trayectoria dirigida al público más jóven, pero sobre todo a aquellos que desean iniciarse en el cine. La película Bandits, de la alemana Katja von Garnier, clausura hoy el festival.
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