El plan del río Guadiaro está sin fecha de ejecución tras 5 años de trámites
El plan de saneamiento y recuperación integral del río Guadiaro, en la provincia de Málaga, no tiene fecha de ejecución cinco años después de que se iniciara su tramitación. Ronda, el mayor de los 18 municipios malagueños que vierte al Guadiaro, no tiene todavía decidida la ubicación de la depuradora -con su construcción se pondría en marcha el plan-, cuya ejecución total se cifra en unos 3.000 millones de pesetas. A esta falta de ubicación achaca el Ejecutivo central el retraso en el inicio de las obras.
La Consejería de Obras Públicas de la Junta inició en 1993 la redacción del programa de saneamiento de los municipios serranos para cumplir la directiva europea que obliga a las poblaciones con más de 15.000 habitantes, como Ronda, a disponer de tratamiento de las aguas residuales en enero del 2001. Los sucesivos cambios de emplazamiento de la estación depuradora de Ronda demoraron hasta 1995 la redacción del documento. Las obras de esta depuradora, cifradas en 1.396 millones de pesetas, se llegaron a incluir como medidas urgentes en los Presupuestos del Estado, para ser sufragada con cargo a los fondos de cohesión de la UE. En marzo de 1995 la Junta remitió a la antigua Dirección de la Calidad del Agua el anteproyecto de la depuradora y el pliego de bases para su licitación. El cambio de Gobierno provocó el parón del plan. Hace un mes se produjo la última reunión entre la Confederación Hidrográfica del Sur y el Ayuntamiento de Ronda para tratar la ubicación de la depuradora. El PSOE achaca al Gobierno popular el retraso de las obras de saneamiento y recuperación del Guadiaro de los dos últimos años. El senador socialista Francisco Zamorano insiste en la necesidad de ejecutar la depuradora de Ronda, al recordar que sólo esta población genera "más del 55% de los vertidos que terminan en el Guadiaro". El secretario de Estado de Aguas, Benigno Blanco, justifica el retraso en "una cierta polémica local" sobre su ubicación. Blanco señala que no hay, por parte del Ayuntamiento rondeño, "una decisión clara" sobre el lugar de instalación. La última posibilidad que se maneja, y que al Gobierno le parece viable, es ubicarla abajo del Tajo. Hasta que la situación no se despeje, el Gobierno no definirá el proyecto y, mucho menos, licitará la obra. Propone como medida provisional la limpieza del río, con una inversión de 300 millones de pesetas.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
Archivado En
- Obras ampliación
- Plan Hidrológico Nacional
- Ronda
- Obras municipales
- Aguas residuales
- Planes hidrológicos
- Ríos
- Obras hidráulicas
- Provincia Malaga
- Residuos
- Obras públicas
- Saneamiento
- Salud pública
- Andalucía
- Espacios naturales
- Ayuntamientos
- Equipamiento urbano
- Problemas ambientales
- Agua
- Política sanitaria
- Sanidad
- Urbanismo
- Administración local
- Salud
- España