Tres desplantes insuperables y el detonante Cascos

En el PP han elaborado ahora informes periodísticos, con cientos de artículos, para fundamentar la escasa capacidad de diálogo de Sergio Marqués. En ese despliegue destacan tres desplantes que la dirección del partido considera insuperables y humillantes con el presidente regional del PP, Isidro Fernández Rozada. El primero fue el citado de la rueda de prensa de la noche electoral, el segundo cuando Marqués apoyó la ley que eleva el rango lingüístico del bable en contra de la opinión histórica de Rozada y el tercero ocurrió el pasado verano, cuando tras preguntarle éste el nombre del nuevo director de Universidades, el presidente autonómico no se lo comunicó. Al día siguiente aparecía en toda la prensa. Rozada está especializado como senador en educación.El detonante irreversible de la crisis afectó, como se sabe, a Francisco Álvarez Cascos, cuando éste vetó la intervención de un consejero de Marqués en unas jornadas empresariales en El Entrego. El consejero, Juan José Tielve, habló al final y desafió a Cascos con versos de Quevedo. Enterado Cascos, en el aeropuerto de Asturias, de regreso a Madrid, se apropió del envite: "Esto ya no es un problema de coordinación que se pueda arreglar aquí en el partido. Es una indisciplina y de eso me encargo yo".

El papel de Cascos en esta crisis es admitido mayoritariamente por los asturianos. En un un sondeo realizado por Vox Pública y publicado ayer por La Voz de Asturias, un 66,9% le tachan como mal candidato, un 27,1% de los encuestados consideran a Marqués "víctima involuntaria de la situación" y un 22,1% valora su sacrificio. El 59,4% cree, sin embargo, que Marqués perdería en unas elecciones autonómicas frente al candidato oficial del PSOE, Vicente Álvarez Areces.