El alcalde socialista de Santiago renuncia a optar a la reelección
Por si eran pocos los problemas del PSOE gallego, sus dirigentes se toparon ayer con la renuncia de uno de sus cargos más populares, el alcalde de Santiago de Compostela, Xerardo Estévez. El edil, con 14 años en el puesto, anunció inesperadamente que no se presentará a la reelección ya que, explicó, considera que su ciclo político está agotado. Estévez, de 50 años, mantenía un duro enfrentamiento con el secretario general de los socialistas gallegos y alcalde de A Coruña, Francisco Vázquez.
Al margen de la rivalidad histórica entre ambas ciudades, el edil compostelano reprochaba a Vázquez su localismo coruñés y su ardiente beligerancia contra las posiciones galleguistas. En las elecciones autonómicas del pasado octubre, Estévez también se opuso a que se formara coalición con Esquerda Unida y Os Verdes. Tras el descalabro socialista en esos comicios, el alcalde santiagués se puso al frente de los que exigieron infructuosamente la dimisión de Vázquez como secretario general.Pese a ese clima de hostilidad, la dirección del PSdeG es consciente del apoyo popular a la figura de Estévez y acogió con desagrado su anuncio de abandono. El secretario de Política Municipal, Javier Losada, hombre de la máxima confianza de Vázquez, deploró la decisión "frívola e irresponsable" del edil compostelano y le reprochó no haberla anunciado antes. Santiago quedó al margen de la primera fase del proceso de elecciones primarias, concluido el pasado sábado, ya que al estar el PSOE en el Gobierno, el alcalde no tenía obligación de someterse al refrendo del partido.
Estévez explicó que pospuso el anuncio hasta ayer porque estaba a la espera de que las administraciones central y autonómica aprobasen el plan de inversiones en Santiago para los actos del Xacobeo 99 y la capitalidad cultural europea del año 2000, que la ciudad gallega compartirá con otras ocho de todo el continente. Una vez que ese proyecto quedó definido hace dos semanas, el alcalde decidió hacer pública su renuncia, lo que propiciará que el próximo candidato se elija en las primarias a celebrar en otoño.
El edil socialista negó de forma insistente que en su decisión hayan pesado los enfrentamientos con Vázquez y, en tono de broma, llegó a pedir que le trajesen un ejemplar de los Evangelios o de la Constitución para dar solemnidad a su promesa de que se retirará de la política. "Siempre he dicho que mis ambiciones empezaban y terminaban en esta ciudad", declaró. "Sigo pensando lo mismo y por eso puedo decir que no optaré a ningún otro cargo ni en la Xunta ni en Madrid ni en Europa. Me dedicaré a mi profesión de arquitecto". No obstante, manifestó que continuará siendo militante socialista.
Elegido por vez primera en 1983, Estévez ha mantenido la alcaldía con la sola interrupción de un lapso de dos años, en los que fue apartado del poder tras una moción de censura. Durante su mandato ha promovido un proyecto de transformación urbanística y de rehabilitación del casco histórico de la ciudad premiado por numerosos organismos internacionales, desde la Unesco a la Comisión Europea.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.