I C denuncia que la carga financiera de la Generalitat roza el cuarto de billón

Las finanzas del Gobierno de Cataluña vuelven a estar en situación crítica apenas dos años después del pacto entre Aznar y Pujol. En estos momentos el 15% de los ingresos de la Generalitat se destina a pagar la carga financiera (intereses más amortizaciones). Son 261.000 millones de pesetas, casi medio billón de pesetas. El diputado Joaquim Novella, de Iniciativa per Catalunya-Els Verds (IC-EV), denunció ayer que la mala gestión y la insuficiencia financiera obligan a reducir las inversiones y la prestación de servicios a los ciudadanos.

El Departamento de Economía anunció ayer la emisión de 12.000 millones de deuda pública de la Generalitat. Coincidiendo con esta decisión del Gobierno, Novella denunció que la deuda de la Generalitat, sin contar estos 12.000 millones, representa el 26% de la acumulada por todas las comunidades autónomas. Entre 1994 y 1997, el endeudamiento ha crecido a un ritmo del 28% anual acumulativo. Novella sostuvo que este ritmo "no es soportable a medio plazo" y la cota de endeudamiento tiene una larga serie de consecuencias negativas. Citó éstas: la inversión de la Generalitat ha sido cada año inferior a la prevista; la Administración catalana ha retrasado más de cinco meses pagos por 150.000 millones a familias, empresas y corporaciones locales; el Gobierno catalán ha recurrido a diversas fórmulas de "contabilidad creativa" para maquillar la situación de sus cuentas. A título de ejemplo se refirió a la venta de 77 edificios mediante la figura del censo enfitéutico, el traspaso al ejercicio presupuestario siguiente de gastos por 95.000 millones y la no contabilización de facturas de Sanidad por valor de 120.000 millones. Novella ha interpelado al Gobierno catalán para que explique cómo piensa hacer frente a esta situación. Ayer adelantó que, a juicio de IC-Els Verds, la situación de las finanzas de la Generalitat se debe en parte a la mala gestión de los gobiernos de CiU y en parte a la insuficiencia del sistema de financiación autonómica. Para justificar la acusación de mala gestión, explicó que los presupuestos de la Generalitat registran cada año una desviación del gasto al alza del orden del 15% y recordó el caso del Consorcio de Turismo de la Generalitat, que en cuatro años acumuló un "agujero" de casi mil millones de pesetas. El diputado propuso hacer frente a esta situación mediante la adopción de dos medidas. La primera debe ser, dijo, la elaboración de un plan de saneamiento "que fije el nivel de deuda y lo reduzca". Este plan debería realizarlo el Parlament, afirmó, porque es la única garantía de que se afronte realmente el problema. La segunda medida propuesta es la negociación de un nuevo sistema de financiación con la intervención de todos los partidos. La experiencia de la negociación entre CiU y el PP se ha saldado con un fracaso, sentenció.