_
_
_
_

Clinton acelera los planes de la OTAN para actuar en Kosovo

El presidente de Estados Unidos, Bill Clinton, ha dado luz verde a la aceleración por parte de la OTAN de los planes para intervenir en Kosovo. «He autorizado y aprobado los preparativos acelerados de la OTAN y actuaremos con los británicos para obtener la resolución más firme posible de las Naciones Unidas», declaró anoche. Cuenta, sin embargo, con la oposición del líder ruso, Borís Yeltsin, aliado de Serbia, que está en contra de una intervención militar exterior en Kosovo y desea reunirse con el presidente yugoslavo, Slobodan Milosevic, para atajar la crisis.

La cumbre ruso-alemana entre Yeltsin y el canciller Helmut Kohl puso de manifiesto que ambos dirigentes quieren evitar un nuevo derramamiento de sangre en la ex Yugoslavia, pero divergen en su enfoque.Washington está animando a la OTAN a planear operaciones aéreas contra objetivos serbios en ese territorio, según confirmaron ayer fuentes del Departamento de Estado. Los norteamericanos apoyan en el Consejo de Seguridad de la ONU el borrador británico de resolución que autoriza el empleo de todos los medios necesarios, incluida la fuerza, para frenar la represión serbia contra la mayoría albanesa. Su lenguaje recuerda el empleado en 1990 a propósito de Irak.

Alemania está a favor de una intervención militar de la OTAN bajo la égida de la ONU, ya que teme que la escalada del conflicto suponga una nueva oleada de refugiados que se sumarían a los 350.000 llegados de Bosnia. Para Rusia, las prioridades son otras, y tanto su ministro de Exteriores, Yevgueni Primakov, como el de Defensa, Igor Serguéiev, se oponen al envío de tropas. «Cuanto más suavemente se responda, más posibilidades tendremos de resolver el tema», dijo Yeltsin, que insistió en la necesidad de diálogo con su aliado.

Preguntado sobre una posible cita de Yeltsin con Milosevic, el portavoz del presidente ruso dijo que resultaba «muy probable», aunque reconoció que la parte rusa aún debía ponerse en contacto con Belgrado.

Tras semanas de falta de sintonía, la Unión Europea y EE UU parecen haber encontrado un paso común. Al igual que la UE, Washington ha decidido adoptar sanciones inmediatas contra Serbia, en concreto la prohibición de inversiones en ese país y la congelación de sus activos en el exterior. Pero Clinton desea que la OTAN prepare una acción de castigo contra Milosevic. «La OTAN está haciendo ahora algo que jamás hizo en Bosnia: planes de intervención para el caso de que el conflicto de Kosovo desemboque en una guerra abierta», dijo ayer Richard Holbrooke, el diplomático estadounidense que negoció Dayton y está mediando en Kosovo. El ministro español de Defensa, Eduardo Serra, anunció ayer que España participará en las maniobras de la OTAN en Albania, en septiembre.

La Casa Blanca se siente estafada por Milosevic. Cree que el líder serbio ha aprovechado la mediación norteamericana en Kosovo, y en particular su padrinazgo de conversaciones directas con el líder de la oposición albanesa, Ibrahim Rugova, para incrementar la represión.

Milosevic reunió ayer por primera vez al Consejo Supremo de Defensa para discutir la crisis de Kosovo. Pertenece a este organismo, entre otros, su adversario el presidente de Montenegro, Milo Djukanovic. Su convocatoria en Belgrado significa el reconocimiento implícito de su legitimidad, algo que Milosevic le había negado hasta ahora. Según el Consejo, el Ejército y la policía controlan las fronteras de Serbia con Macedonia y Albania.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_