_
_
_
_
EL JUICIO POR EL 'CASO MAREY'

Barrionuevo, Sancristóbal y Damborenea se acusan de mentirosos en un careo sorpresa

El ex ministro José Barrionuevo mantuvo ayer dos tensos careos con el ex gobernador civil de Vizcaya Julián Sancristóbal y el ex secretario de los socialistas vizcaínos Ricardo García Damborena sobre la existencia de una presunta conversación telefónica que pudo tener lugar en la noche del secuestro de Segundo Marey. Durante el careo, Barrionuevo tildó de "mentiroso" a Sancristóbal y de "delator" a Damborenea, mientras éstos insistieron en sus acusaciones de que el ex ministro dio su beneplácito al secuestro de Segundo Marey. El ex coronel convicto Juan Alberto Perote, primero de los testigos en este juicio, dijo estar "convencido" de que el ex presidente Felipe González autorizó las acciones contra ETA en Francia.

Más información
El ex coronel Perote reconoce que fabricó dos sellos del GAL

Al inicio de la sesión, el presidente del tribunal anunció por sorpresa la celebración de sendos careos entre Barrionuevo, Sancristóbal y Damborenea, acordados de oficio, antes de la sesión, por los 11 magistrados. La decisión dejó perplejos a todos los presentes por cuanto la noche del pasado lunes la Sala había rechazado esa misma prueba, solicitada por la defensa de Damborenea. El presidente, José Jiménez Villarejo, explicó que se pretendía aclarar un punto que no estaba entre los cinco propuestos para el careo, por el abogado de Damborenea, Enrique García de la Lama: la supuesta conversación telefónica entre Sancristóbal y Barrionuevo la noche del secuestro, el 4 de diciembre de 1983.Jiménez Villarejo dijo que se trataba de ponerles de acuerdo sobre la existencia de la presunta conversación telefónica que habrían sostenido el entonces ministro Barrionuevo y Sancristóbal. Éste se encontraba la noche del secuestro reunido en la jefatura superior de Policía de Bilbao, con su titular, Francisco Álvarez, y con García Damborenea. Pero, presuntamente, sólo hablaron Sancristóbal y Barrionuevo.

Tras un acalorado intercambio de acusaciones, cada uno se mantuvo en su posición inicial, con una firmeza que no permitió sacar conclusiones claras. Sancristóbal dijo que a lo largo de esa noche habló varias veces con Barrionuevo. Éste replicó que no era verdad y que Sancristóbal había cambiado su versión inicial.

Perote, primer testigo

El ex coronel Juan Alberto Perote, primer testigo que comparece en el juicio Marey ante el Tribunal Supremo, declaró que el documento conocido como acta fundacional de los GAL, fechado el 6 de julio de 1983, fue realizado por el departamento que él dirigía, la secretaría general del Cesid y el gabinete encargado de terrorismo. "Era un documento extenso, un estudio teórico, sobre contraterrorismo legal e ilegal".Según Perote, del documento se desprendían responsabilidades diversas, ya que en él se indicaba que "sólo quien está conduciendo la lucha contra el terrorismo en su conjunto podrá decidir emprender o no acciones en el sur de Francia". En opinión de Perote, la única persona capaz de tomar tal decisión era el presidente del Gobierno, Felipe González, porque en este tipo de operaciones había que coordinar varios departamentos, entre ellos Interior y Defensa.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Perote enfatizó que el Cesid nunca realizó acciones violentas en Francia, ya que este servicio se limitaba a "actividades de inteligencia". En cuanto a si les encomendaron combatir a los GAL, respondió: "No, más bien al contrario. Se vigiló a personas que investigaban a los GAL, como políticos y periodistas". No detalló más porque dijo que era "materia clasificada".

Perote admitió haber tenido una relación comercial con Francisco Álvarez y amistad con Sancristóbal, con quien almorzó hace 15 días. "Con Álvarez tuve contactos comerciales durante mi etapa de jefe de seguridad de Repsol, en la que hicimos un barrido electrónico de teléfonos".

Contactos de Perote

El testigo, a preguntas del defensor de Rafael Vera, Manuel Cobo del Rosal, aceptó que había mantenido un contacto con Álvarez, otro con el comisario procesado Miguel Planchuelo, tres con Vera y varios más con Sancristóbal en fechas cercanas al juicio. El ex coronel reconoció que había aportado datos a algunos de los procesados como Sancristóbal y Álvarez, cuando éstos ingresaron en prisión en diciembre de 1994."He llegado a aportar datos e informes a Sancristóbal y Álvarez, ante la posibilidad de que ésto fuera a quedar en el ámbito de los funcionarios, y yo tenía datos de que no era así". El ex coronel añadió que había comentado esos "datos" a diferentes personas, como su mujer y su hermano.

Perote se negó a reconocer como suyo un memorándum publicado por la revista Tiempo el pasado 25 de mayo sobre su estrategia de cara al juicio. En el manuscrito con membrete de la empresa ZPA, que el ex coronel tituló "Análisis de mi intervención en el juicio Marey", mencionaba cómo "lograr el máximo provecho" para su situación penal además de "obtener la condena del PSOE" y el "apoyo a otros".

A preguntas de Cobo del Rosal, el testigo se vio forzado a admitir: "En principio es mi letra, siempre y cuando se pueda ratificar..." Perote explicó que se trataba de unas "reflexiones" que suele escribir: "Cuando las acepto las mantengo y cuando las rechazo, las rompo y las tiro a la papelera".

El ex coronel también pasó revista al registro realizado por el juez Baltasar Garzón en su celda de la cárcel de Alcalá, cuando se encontraba en prisión preventiva. "Se me incautó un relato en el que hago referencia a 12 documentos del Cesid que luego fueron desclasificados. En un primer registro, el juez cogió ese relato. En un segundo registro, Garzón cogió dos cuartillas sin trascendencia".

La noche de Talbi

El comisario Jesús Rodríguez Velasco, jefe del puesto fronterizo de Dantzarinea, y su subordinado Francisco Javier Calabria del Mazo, relataron que la policía francesa les informó el 4 de diciembre de 1983 del secuestro de una persona. Esa noche llegó el mercenario Mohand Talbi al puesto, donde fue recogido por Amedo. Después, el jefe de policía de Pamplona ordenó a los agentes: "Es una operación de Bilbao. Ustedes absténganse".En contra de lo afirmado días atrás por todos los policías que mantuvieron secuestrado a Marey, los dos responsables del puesto fronterizo navarro de Dantzarinea aseguraron ayer que la frontera no estaba impermeabilizada por las autoridades francesas. La impermeabilización de la frontera fue la excusa aducida por quienes custodiaron a Marey para no liberarle hasta pasados 10 días.

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_