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Borrell acusa a Aznar de "engañar a la sociedad" con "cuentas trucadas"

Luis R. Aizpeolea

El candidato socialista a la presidencia del Gobierno, José Borrell, acusó ayer al actual presidente, José María Aznar, de "engañar dramáticamente a la sociedad" porque "los presupuestos del Estado están trucados hasta la raíz". Borrell aseguró que da por bueno el informe del jefe de la Oficina Presupuestaria de La Moncloa, José Barea, según el cual el crecimiento del déficit va a impedir a España cumplir la convergencia europea.

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José Borrell compareció ayer, tras la reunión de la Ejecutiva Federal del PSOE, para denunciar que "los equilibrios presupuestarios del Gobierno Aznar están gravemente puestos en cuestión" y suponen "una gravísima hipoteca para el futuro". Borrell teme que esa hipoteca culmine en "un recorte de los gastos sociales" si se tiene en cuenta que el Estado va a ingresar menos tras la reforma del IRPF.El candidato anunció una ofensiva parlamentaria cuyo objetivo es la convocatoria urgente de un pleno monográfico del Congreso para que el Gobierno explique el estado real de las cuentas públicas. "Quiero que sea un pleno más importante que el celebrado con motivo de las escuchas telefónicas porque me parece que este asunto es más grave", dijo.

Si el Gobierno rechaza la petición, Borrell advirtió que solicitará la convocatoria de la Diputación Permanente del Congreso, una vez concluido el periodo de sesiones en julio. Anunció que él mismo protagonizará este debate.

Borrell anunció igualmente la propuesta de una auditoría especial por parte del Tribunal de Cuentas sobre la verdadera situación patrimonial y financiera de la Seguridad Social, que se encuentra "sometida a serias tensiones por el incumplimiento por el Gobierno de las transferencias necesarias para cumplir con lo acordado en el Pacto de Toledo". Asimismo, avanzó la exigencia de la información necesaria sobre los recursos procedentes de las privatizaciones que "parecen haberse volatilizado".

El candidato apoyó su denuncia en los informes de Barea, en los que pronostica que en los próximos cuatro años el crecimiento del déficit en España impedirá cumplir la convergencia europea, y resaltó que el Gobierno "ha atrasado la contabilización de pagos y ha adelantado la contabilización de ingresos".

Los gastos vencidos y no contabilizados se refieren a los siguientes conceptos: La indemnización por la sentencia de la colza (400.000 millones de pesetas); las transferencias de educación a las autonomías (124.700 millones); el agujero de RTVE (para reequilibrarlo harían falta 800.000 millones); la financiación de los complementos de mínimos (685.000 millones), el pago aplazado de la inversión pública (451.000 millones) y el programa de profesionalización del Ejército (280.000 millones); en total 2,7 billones de pesetas.

Borrell recordó: "Barea, el autor de los informes que nos permiten alertar a lo sociedad de los riesgos, depende del Ejecutivo" y le otorgó todo el crédito.

El candidato acusó a Aznar de abrir una contradicción al renunciar a ingresos con la reforma del IRPF y, paralamente, reclamar a Europa los fondos de cohesión. Para ello utilizó contra Aznar el mismo calificativo que éste usó contra Felipe González en 1992. "Este aprendiz de pedigüeño en que se ha convertido el señor Aznar tendrá dificultades para explicar cómo sigue reclamando fondos de cohesión que en su día despreció al mismo tiempo que parece que le sobran recursos para disminuir los ingresos de las administraciones. Está renunciando con una mano a los ingresos que reclama con la otra", concluyó.

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