Los pueblos cercanos a El Atazar rechazan el plan que protege la presa

El plan de ordenación de El Atazar, elaborado por la Consejería de Medio Ambiente, ha motivado las quejas de los pueblos que rodean este embalse, que anuncian alegaciones para evitar su aprobación. El plan establece una protección de 500 metros en torno a la presa y obliga a demoler las edificaciones en esta zona. El alcalde de Cervera, Matías Martín, del PSOE, afirma: "Me quedo sin el 75% de mi término".

El plan de ordenación de El Atazar protege la zona de influencia del embalse para evitar que la contaminación deteriore las aguas de la principal reserva hidráulica de Madrid: más de 425 hectómetros cúbicos de aguas cristalinas. Para lograrlo, propone la demolición de las edificaciones ilegales que rodean el embalse, proyecta la construcción de abrevaderos para que el ganado no beba en la presa, prohíbe la navegación de motor y promete la construcción de dos nuevas depuradoras en Lozoyuela y Puebla de la Sierra.

Indignación

Sin embargo, los alcaldes de esta zona se muestran indignados. El regidor de Cervera (96 habitantes), el socialista Matías Martín, recuerda que el plan de ordenamiento impone graves cortapisas urbanísticas a los municipios que rodean el embalse "a cambio de nada". "Este plan impide que construyamos en el 75% de nuestro término municipal. Lo que nos queda está, además, protegido por la Ley Forestal. En definitiva, que nos abocan a estancarnos y nos impiden el más mínimo crecimiento ¿Y qué nos ofrecen como contraprestación? Nada de nada".El regidor reclama que el Canal de Isabel II, propietario del embalse, contrate "a los parados de la zona, que haya ayudas a la ganadería, al turismo... ¡Algo! En los años setenta, cuando se construyó el embalse, perdimos nuestras mejores tierras. La mayoría de los vecinos tuvo que emigrar. Ahora nos dan la estocada final".

El primer teniente de alcalde de El Berrueco (318 habitantes), Jaime Sanz, independiente, añade: "Es ridículo que quieran proteger el entorno de El Atazar y se olviden de lo que pasa unos kilómetros más allá. En el pantano vierten directamente un total de 27 núcleos urbanos. Es decir, la basura proviene de toda la comarca, y nos castigan sólo a los que estamos pegados al embalse".

Sin contrapartidas

Sanz recuerda que en el anterior plan de ordenación, vigente hasta ahora, se les prometió como contrapartida unas inversiones de 136 millones de pesetas. "Ni un duro nos llegó. Y ahora vuelven a prometernos más dinero: 278 millones. Lo curioso del asunto es que los proyectos que nos presentan son los mismos, punto por punto, de los del anterior plan y que nunca se cumplieron. Esto parece una broma", concluyó.