El ex dirigente del PSOE no logra probar la llamada de Barrionuevo
"De lo que yo oí, no me cabía la menor duda de que el gobernador civil [Julián Sancristóbal] hablaba con el ministro", dijo ayer tarde Ricardo García Damborenea. Pero, pese a reconocer que aquella noche del secuestro de Segundo Marey, le "interesaba mucho conocer la opinión" de Barrionuevo sobre el asunto, el exdirigente socialista reconoció varias veces que no conversó con él. Claro que, al final del interrogatorio, y ante la endeblez de su testimonio, dudó y llegó a decir que no podía asegurar al 100% que no hubiese conversado con el titular de Interior en 1983.
El primer cargo político que presta declaración en la vista oral recordó, a preguntas del abogado Pablo Jiménez de Parga, que fue convocado a la Jefatura de Policía de Bilbao "después de cenar" y que allí estuvo "unas horas". Tras insistir en que los teléfonos del despacho del jefe superior, el comisario Francisco Álvarez, "echaban humo" por las constantes llamadas, agregó que a él sólo le importaba una: la del ministro.
Según García Damborenea, no prestó atención a la mayoría de las comunicaciones recibidas aquella noche de diciembre de 1983, sino sólo a la de Barrionuevo. "Se habló con el ministro porque o se hablaba con él o con el presidente del Gobierno", señaló.
"Hola, ministro"
El antiguo líder socialista vizcaíno explicó que supo que quien llamaba era Barrionuevo porque Sancristóbal cogió el auricular y se dirigió a su interlocutor con la fórmula: "Hola, ministro". Y que, según una deducción de Perogrullo, "no iba a ser el ministro de Agricultura..."."¿Y cuando usted constata que el señor Sancristóbal habla con el ministro, no quiso usted hablar con él? ¿Cómo se explica eso si usted asegura que tenía tanto interés en conocer la opinión del ministro?", inquirió el letrado. El acoso de este abogado, precedido por el de su colega Manuel Cobo del Rosal, hizo que García Damborenea empezase a tambalearse. Acabó en un callejón y su única salida fue decir: "Bueno, no quiero negar del todo que no hablase con el ministro; es posible que sí hablase; no sé, no quiero negarlo por completo...".
En otro momento señaló que no era verdad lo que había declarado en la instrucción sumarial respecto a que el primer comunicado firmado por los GAL le fue dictado por Sancristóbal. Ayer, corrigió: "Se elaboró pensando en voz alta y viendo qué tonterías se ponían ahí".
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