El impacto de los mosquitos
La ruptura de la «ley del silencio» que ha imperado en la política francesa durante décadas acredita estos días que los sistemas de financiación ilegal han seguido funcionando pese a los propósitos de enmienda proclamados tras las sucesivas amnistías. Al contrario que en épocas pretéritas, los primeros testimonios judiciales parecen haber tenido un efecto contagioso que probablemente no es ajeno a la crisis profunda de la derecha. Situado a la defensiva, ante acusaciones que dan cuenta casi a diario de la envergadura de la corrupción y amenazan al propio Chirac, el RPR se ha puesto a remover sus archivos en busca de escándalos en las filas socialistas.Ayer, el consejero general del departamento del Gard, Etienne Mourrut (RPR), acusó judicialmente al consejero socialista Claude Barral por haber cobrado 320.000 francos (8 millones de pesetas) en pago de un «informe» de 12 páginas sobre «El impacto del saneamiento del río Vidourle en las colonias de mosquitos».
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