_
_
_
_

El Maestranza despide la temporada con "Turandot", del Puccini más vanguardista

José Andrés Rojo

Turandot, la ópera de Puccini que cuenta la historia de una princesa china, vengativa y cruel como una esfinge de hielo que, al final, es redimida por el amor, cierra la temporada del Teatro de la Maestranza de Sevilla -funciones: hoy, el 27, 29 y 31- con el gran maestro Alain Lombard dirigiendo a la Sinfónica de Sevilla en el foso. El fascinante y exótico cuento de hadas encierra dentro la maquinaria musical más compleja que jamás escribió Puccini.

En realidad, Turandot es la negación del tópico que reduce a Giacomo Puccini (1.858-1.924) a la simple condición de autor de melodramas de música simple o convencional que, según sus detractores más furibundos, es lo que serían prodigios como Madama Butterfly o La Bohème. En Turandot, la obra póstuma de Puccini -el compositor murió de cáncer de garganta a falta de la última escena, que fue completada, con mano timorata, por Franco Alfano: al estrenarla, en 1926, Toscanini, un amigo fraternal de Puccini al que éste llamaba "un cerdo que dirige divinamente", cortó la función donde la dejó el maestro- pueden apreciarse destellos geniales de la inquietud vanguardista que le llevó a admirar a Debussy, a Stravinsky o a Schömberg, cuyo rompedor Pierrot lunaire siguió partitura en mano, y a ser admirado por Ravel o Mahler. Turandot, donde hay politonalidad y una instrumentación insólita, también remite a la vanguardia del teatro simbolista francés. Así pues Turandot es una ópera de culto en las capillas melómanas y el gran testamento futurista de Puccini. "Aquí hizo lo contrario de lo que había hecho antes", apreció la directora de escena, Sonja Frisell. "Es algo grande y algo nuevo", señaló el director musical, Alain Lombard, un vitalista veterano formado con Bernstein, Karajan y Fricsay que ya grabó Turandot, para EMI, con Caballé y Carreras. La historia de la princesa china que venga la humillación ancestral de la mujer en todos sus pretendientes forzándolos a averiguar un triple acertijo cuya ignorancia les condena a la muerte implacable encierra una mitificación de la muerte y la crueldad que, según el director Wladimir Jurowsky, que montó Turandot en Madrid, anticipó la ascensión del fascismo en Italia. "No estoy de acuerdo con eso", rechazó Lombard. Lecturas políticas al margen, la ópera funciona como un gran guiñol exótico con roles que exigen voces modélicas. La crítica es escéptica acerca de que ahora existan esas voces equiparables a las legendarias ya unidas al título -Callas, Nilsson, Corelli, Scotto...-, pero Lombard tampoco está de acuerdo. "No hay crisis de voces", sentenció. Lombard, que ha encontrado a la Sinfónica de Sevilla "brillante y profesional", aplaude el reparto: Audrey Stottler, Dimitri Kavrakos, Nicola Martinucci y Patrizia Pace.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

José Andrés Rojo
Redactor jefe de Opinión. En 1992 empezó en Babelia, estuvo después al frente de Libros, luego pasó a Cultura. Ha publicado ‘Hotel Madrid’ (FCE, 1988), ‘Vicente Rojo. Retrato de un general republicano’ (Tusquets, 2006; Premio Comillas) y la novela ‘Camino a Trinidad’ (Pre-Textos, 2017). Llevó el blog ‘El rincón del distraído’ entre 2007 y 2014.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_