Los escoltas de Clinton podrán ser llamados a declarar en el "caso Lewinsky"

Una juez federal de Estados Unidos decidió ayer que los agentes de seguridad que protegen al presidente norteamericano pueden ser obligados a prestar testimonio ante el gran jurado en el caso Lewinsky .La juez Norma Holloway Johnson rechazó el argumento de un «privelegio especial» para los agentes de seguridad que había reclamado el Gobierno de Bill Clinton. La Casa Blanca había advertido de que la seguridad del presidente sufriría serias consecuencias si las personas encargadas de su protección podían ser llamadas a dar testimonio sobre la vida personal del mandatario.

Clinton reconoció que la decisión judicial le había sorprendido: «Nunca se le ocurrió a nadie que alguien pudiera despreciar tanto la responsabilidad de los agentes de seguridad y que este tema mereciera una discusión».

Respecto a las posibles consecuencias, Clinton opinó que «quizá haga que los presidentes sean más cautos en sus conversaciones, el trabajo que hacen y cómo trabajan».

El ex presidente George Bush, quien se enfrentó a Clinton en las elecciones de 1992, habló hace unas semanas a favor del privelegio especial para los agentes que protegen al presidente, y un ex jefe de la seguridad presidencial advirtió que el rechazo del citado privelegio garantizaría que algún presidente muriera asesinado en el futuro.

Hace una semana, la juez Johnson manifestó que estos argumentos no le convencían. «No lo veo», declaró.

Kenneth Starr, el fiscal independiente que está investigando si Clinton mantuvo relaciones sexuales con Monica Lewinsky y luego la presionó para que mintiera, dijo que «el testimonio de los agentes de seguridad es altamente relevante para el caso».

Clinton afirmó que no sabe si va a recurrir la decisión de la juez Johnson. Otra posibilidad sería que Clinton reclamara «el privelegio ejecutivo» para impedir que los agentes sean llamados ante el gran jurado.